RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- El Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX) informó que, en la tarde del miércoles 9 de abril, bandas criminales tomaron el control de la comuna haitiana de Mirebalais, donde se encontraba ubicado un edificio que albergaba el Consulado Dominicano en esa zona.
En un comunicado oficial, el MIREX detalló que, gracias a las medidas preventivas adoptadas por la Cancillería, todo el personal dominicano ya había sido evacuado días antes de la ocupación del poblado por las pandillas. Además, el local consular se encontraba cerrado en el momento de la toma del control por parte de los grupos delictivos, lo que evitó cualquier incidente de riesgo para el personal diplomático.
La Cancillería aclaró que, si bien se trata de un hecho condenable, el inmueble ocupado es alquilado y, por lo tanto, no pertenece de manera directa al Estado dominicano. Además, aseguró que en el interior del edificio no se encontraban estampillas de visado, libretas de pasaporte ni documentos oficiales, lo que significa que no hubo ninguna afectación al interés nacional.
Contexto de la situación
El informe subraya que, aunque la situación es preocupante, las autoridades dominicanas actuaron con anticipación para proteger al personal diplomático y evitar daños mayores. La ocupación del consulado en Mirebalais se produce en un contexto de creciente violencia en varias zonas de Haití, donde las bandas criminales continúan ganando terreno y generando una grave crisis de seguridad en diferentes regiones del país vecino.
El MIREX ha reiterado su compromiso con la seguridad de sus funcionarios y el resguardo de los bienes y representaciones diplomáticas en el extranjero. La Cancillería también expresó su preocupación por la situación en Haití, instando a la comunidad internacional a redoblar los esfuerzos para restaurar el orden y la seguridad en el país vecino.
Próximas acciones
El Ministerio de Relaciones Exteriores indicó que seguirá monitoreando de cerca la situación en Haití, en coordinación con las autoridades locales y la comunidad internacional, para garantizar la protección de los ciudadanos y los intereses dominicanos en la región.
