RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- El senador por la provincia Santiago Rodríguez, Antonio Marte, expresó su firme respaldo a la modificación de la Ley 137-03 sobre el tráfico ilícito de migrantes, destacando la severidad de las nuevas disposiciones legales que contemplan penas de hasta 25 años de prisión para los infractores.
Durante una entrevista en el programa matutino Su Mundo, Marte calificó la propuesta como “la ley más dura que he podido ver”, al referirse al incremento sustancial de las sanciones y a los criterios económicos que la reforma contempla.
En sus palabras, el legislador argumentó que el tráfico de personas no solo representa un delito, sino una “traición a la patria”.
“El que trafica con un ilegal está atentando contra la soberanía nacional. Estas medidas son necesarias para proteger los intereses del país”, sostuvo el senador.
La reforma también ha sido planteada como una respuesta al creciente desafío que representa el tráfico de personas en la frontera y otras zonas vulnerables del país.
Según el legislador, el endurecimiento busca enviar un mensaje claro de cero tolerancias a quienes se lucran con la migración irregular.
En la misma entrevista, Marte se refirió a la propuesta legislativa conocida como “10 y 10”, impulsada por el diputado Omar Fernández, que establece sanciones mínimas de 10 años de prisión para funcionarios públicos hallados culpables de participar en redes de tráfico ilícito de personas.
El senador valoró la iniciativa como un paso importante para combatir la corrupción y desincentivar la complicidad estatal en este delito.
“Si un funcionario se involucra en estas prácticas, tiene que pagar con cárcel. No se puede permitir que quienes tienen la responsabilidad de hacer cumplir la ley sean parte del problema”, enfatizó.
Ambas propuestas legislativas forman parte de un conjunto de esfuerzos en el Congreso Nacional para actualizar el marco jurídico y fortalecer la respuesta del Estado frente a delitos relacionados con la migración irregular y la trata de personas, en medio de crecientes presiones internas y externas para reforzar la seguridad fronteriza.