RDÉ DIGITAL, ESTADOS UNIDOS (EFE).- El expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, criticó este jueves el nuevo plan fiscal promovido por Donald Trump y aprobado por la Cámara de Representantes, al considerar que representa una amenaza directa para millones de ciudadanos en situación de vulnerabilidad, incluidos ancianos, personas con discapacidades y familias de bajos ingresos.
A través de su cuenta en la red social X, Obama sostuvo que “los estadounidenses más vulnerables no podrán obtener el tratamiento, los medicamentos o la atención que necesitan para salvar sus vidas”, si la iniciativa se convierte en ley. El proyecto, impulsado por la bancada republicana en la cámara baja, contempla amplios recortes a programas sociales clave, entre ellos Medicaid y Medicare, así como la eliminación de créditos fiscales destinados a facilitar el acceso a seguros médicos.
El expresidente demócrata instó a la ciudadanía a comunicarse con sus representantes en el Senado, donde el proyecto será sometido a votación en los próximos días. “Hacerles ver cuánto afectaría puede marcar la diferencia”, escribió.
Según cifras divulgadas por la Oficina de Presupuesto del Congreso, la propuesta conllevaría un recorte de casi 500.000 millones de dólares en el programa Medicare a partir de 2026 y añadiría 2,3 billones de dólares al déficit federal en un período de 10 años. A pesar de sus efectos fiscales, los republicanos buscan que el paquete se apruebe antes del 4 de julio, Día de la Independencia de Estados Unidos, fecha simbólica para el expresidente Trump, quien aspira a capitalizar políticamente el avance de la medida.
Durante su presidencia (2009–2017), Obama lideró la promulgación de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio, conocida como ‘Obamacare’, con la que se amplió la cobertura médica a millones de estadounidenses de bajos ingresos. Hoy, el expresidente advierte que los recortes propuestos podrían desmantelar gran parte de esos avances.
“Quieren recortar la financiación federal para Medicaid, eliminar los créditos fiscales que ayudan a más personas a costear la cobertura y aumentar los costos para las familias de clase trabajadora”, expresó Obama.
El proyecto aún debe superar una votación en el Senado, donde los republicanos mantienen una mayoría ajustada. La expectativa sobre su desenlace crece a medida que sectores sociales y organizaciones defensoras de la salud pública aumentan la presión sobre los legisladores.