RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.– Se ha presentado un caso preocupante que implica presuntas prácticas ilegales relacionadas con el proceso electoral en República Dominicana. José Paredes y Carlos peña, ambos ciudadanos dominicanos, han denunciado la supuesta compra de cédulas por parte del Partido Revolucionario Moderno (PRM), lo que ha calificado como acciones desesperadas por parte del gobierno.
Por una parte, Paredes expresó su preocupación al afirmar que: “el gobierno está desesperado, ellos van a perder las elecciones, las presidenciales y las congresionales van a perder”. Además, reveló que fue abordado con una oferta de tres mil pesos a cambio de su cédula, a lo que se negó rotundamente, destacando que “vender mi conciencia por 4 años, eso no tiene precio”.
Asimismo, manifestó su frustración por la situación económica actual, señalando que “la comida está demasiado cara aquí debe haber un cambio obligado, como quiera que sea ellos van para afuera”. Esto refleja el sentir de muchos ciudadanos que ven en las elecciones una oportunidad para un cambio significativo en la gestión gubernamental.
Paredes también expresó su desconfianza hacia los candidatos del partido en el poder, argumentando que “cuando esa gente gana no conocen a nadie, ninguno resuelve”. Esta desconfianza refleja la percepción generalizada de que los políticos no están cumpliendo con las expectativas y necesidades de la población.
Estas denuncias plantean preocupaciones legítimas sobre la integridad del proceso electoral y la necesidad de garantizar elecciones justas y transparentes. La compra de votos y la manipulación del electorado socavan la democracia y la confianza en las instituciones gubernamentales.
Por otro lado, el candidato a la presidencia por el partido Generación de Servidores (GENS), Carlos Peña, ha denunciado públicamente que el candidato a la alcaldía del PRM en Santo Domingo Oeste, Francisco Peña, está comprando votos. A través de un video compartido en sus redes sociales, se observa al candidato entregar algo a una señora, presuntamente dinero.
Peña hizo un llamado a la Junta Central Electoral, proporcionando la evidencia del presunto delito electoral, y expresó su preocupación por el impacto negativo que estas prácticas tienen en el proceso democrático. Estas acusaciones subrayan la importancia de investigar y abordar de manera efectiva cualquier irregularidad que comprometa la integridad de las elecciones y el ejercicio democrático.
