RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.-El emblemático pívot Bill Walton, quien ostenta dos títulos de la NBA y es miembro del prestigioso Salón de la Fama, ha fallecido este lunes a los 71 años tras una larga batalla contra el cáncer, según informó la liga de básquetbol estadounidense.
«Bill Walton era verdaderamente excepcional. Como integrante del Salón de la Fama, redefinió el rol de pívot», expresó el comisionado de la NBA, Adam Silver, en un comunicado. «Como estimado miembro de la familia de la NBA durante 50 años, Bill será profundamente extrañado por todos aquellos que tuvieron el placer de conocerlo y apreciarlo».
Seleccionado en la primera posición del Draft de 1974, Walton conquistó un campeonato con los Portland Trail Blazers en 1977, siendo nombrado MVP de las Finales.
A pesar de perderse dos temporadas completas debido a una lesión en el pie, y haber recibido pronósticos desalentadores por parte de los médicos, Walton demostró su valentía al regresar a las canchas.
En 1985, se unió a los Boston Celtics, donde se convirtió en uno de los mejores suplentes de la historia y contribuyó significativamente a la consecución de su segundo anillo en 1986.
Su llegada a Boston implicó el intercambio con otra leyenda, Cedric Maxwell, junto con una selección de primera ronda que resultó en Arvydas Sabonis para Portland. Walton formó parte del legendario equipo de los Celtics de 1986, uno de los más destacados en la historia de la NBA, antes de ser nuevamente afectado por lesiones.
En 1987, Walton se vio obligado a retirarse temporalmente debido a una lesión y, a pesar de intentar un regreso en 1990, las lesiones persistentes marcaron el fin de su carrera. No obstante, su legado perdurará en la memoria de los aficionados al baloncesto.
Además de su brillante trayectoria como jugador, Walton es recordado por su compromiso social, como su decisión de no participar en los Juegos Olímpicos de 1972, en protesta contra la guerra de Vietnam.
Posteriormente, incursionó en el ámbito de la comentarista deportivo, destacándose en roles para la NBA y la NCAA en diversas plataformas, incluyendo ESPN, donde dejó su huella antes de retirarse en 2009, siendo reconocido con un premio Emmy en 2001 por «Mejor Narración Deportiva».
Con una estatura de 2,11 metros, Walton fue nombrado MVP de la temporada de la NBA en 1978 y continuó dejando una huella indeleble en la liga hasta su retiro después de 10 temporadas, con estadísticas promedio de 13,3 puntos, 10,5 rebotes, 3,4 asistencias y 2,2 bloqueos.
El legado de Bill Walton trasciende más allá de las canchas, dejando un impacto perdurable tanto en el deporte del baloncesto como en la sociedad en general.
