RDÉ DIGITAL, SANTIAGO, RD.- Con la asistencia de las autoridades de Santiago y la Junta Directiva del Ateneo Amantes de la Luz, el arzobispo Metropolitano, monseñor Héctor Rafael Rodríguez Rodríguez, y su auxiliar, Carlos Tomás Morel Diplán, oficializaron una eucaristía en “Acción de Gracias” por el 150 aniversario de la entidad cultural y educativa “Amantes de la Luz”.
En la homilía, el arzobispo Rodríguez Rodríguez saludó la fundación y vida de la más antigua biblioteca del país e instó a continuar “amando la luz”, para cerrar el camino a la maldad y la oscuridad.
La gobernadora provincial, Rosa Santos; el alcalde de Santiago, Ulises Rodríguez; Carlos Manuel Estrella, presidente de la centenaria institución, así como pasados presidentes, funcionarios de la regional de Cultura y socios concurrieron a la celebración religiosa efectuada la noche de lunes, en la Catedral Santiago Apóstol “El Mayor”.
Como presidente del Ateneo, Estrella expresó que en la víspera del cumpleaños 150 de la entonces llamada Sociedad de Amantes de la Luz, “nos reunimos con fervor cristiano para dar gracias al Altísimo por los bienes concedidos en una trayectoria tan dilatada y de tanta incidencia positiva en la educación, la cultura y la promoción de los mejores valores del comportamiento ciudadano con responsabilidad social”.
Estrella explicó que entre el Ateneo y la Catedral ha habido desde siempre una vinculación geográfica e histórica, desde la relación de cercana vecindad con el segundo local de la entidad ubicado justo al frente del templo por la calle 30 de marzo, hasta la permanencia en el tiempo, porque han sido testigos de grandes acontecimientos y propósitos compartidos.
“Como, por ejemplo, la propuesta de Amantes de la Luz de reivindicar la figura procera de José Antonio – Pepillo- Salcedo, por sus méritos como patriota, y el traslado de sus restos a este templo, donde descansaron a partir de 1928”, añadió.
En las fiestas patronales de Santiago Apóstol “El Mayor”, Estrella precisó que Amantes de la Luz es parte del programa oficial y sus instalaciones del Ateneo acogen actividades de carácter histórico y didáctico sobre esta tradición.
Los ateneístas que llevaron la bandera nacional como parte de las ofrendas del servicio religioso fueron los socios, profesor Anthony Almonte y Adelso Reinoso, Premio Nacional de la Juventud.
La presentación de los libros de la biblioteca de Amantes de la Luz fue realizada por los pasados presidentes Carmen Pérez Valerio y Danilo Gómez; la biblia fue entregada por Blas Caba, mientras que el pan y el vino fue presentado por Carlos Manuel Estrella y su esposa Elsa de Estrella.
La misa con motivo de los 150 años de la institución cultural fue transmitida en vivo por Radio Amistad, Radio Luz, Radio Jesús, Radio Santa María y Estudio 97.9 fm, y para la televisión en el espacio del programa Puntos y Enfoques de Teleuniverso Canal 29.
Al concluir la misa, los ateneístas e invitados compartieron en el edificio Monseñor Roque Adames, del Arzobispado de Santiago, un cóctel amenizado por el saxofonista Juan Colón, quien ha sido ganador de la medalla Pro-Arte Nacional que entrega el Ateneo Amantes de la Luz.
El Ateneo Amantes de la Luz arriba a un siglo y medio en el que ha sido precisamente faro y guía para todas las actividades culturales, sociales y comunitarias del Cibao, con una permanencia que la convierte en testigo calificado de la historia.
Nació como biblioteca el 4 de junio de 1874, por iniciativa del educador, humanista, periodista y poeta Manuel de Jesús de Peña y Reinoso y fue incorporado el 15 de febrero de 1936.
Entre sus socios fundadores figuran también hombres de la talla de Ulises Franco Bidó, Nicolás Hungría, Joaquín Hungría, Genaro Pérez y Juan Antonio García.
Además de los servicios que ofrece la biblioteca “Peña y Reinoso” cuenta con la valiosa hemeroteca “Presbítero Manuel de Jesús González”, con el salón de actos “Profesor Federico Izquierdo” y la sala “Doctor Carlos Dobal Márquez”, donde se desarrollan importantes actividades como la entrega del Premio al Magisterio Nacional Manuel de Jesús de Peña y Reinoso.
Y aunque llenaría varios tomos reseñar todas las actividades del Ateneo, es oportuno resaltar que la noble misión que cumple continúa con el mismo ahínco y la dedicación de siempre.
En su acervo figuran ediciones de libros, colecciones y correspondencias de grandes protagonistas de nuestra historia, pero también es la única biblioteca pública de la ciudad corazón.
Como toda institución con tan larga y dilatada trayectoria, los servicios que brinda el Ateneo están por encima de sus posibilidades, y tiene otras urgencias, como llevar adelante la digitalización de todo su patrimonio bibliográfico y hemerográfico, lo que colocaría en la web un inmenso aporte histórico y cultural, para lo cual precisa de recursos extraordinarios.
Urge también un mantenimiento adecuado al edificio donde opera hace 47 años, por lo que las autoridades municipales y nacionales debieran ocuparse de atender estas necesidades, porque la conservación de todo ese acervo de incalculable valor que atesora la entidad requiere una adecuada climatización.