RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- El intercambio comercial en la frontera dominicana con Haití se encuentra paralizado en el paso de El Carrizal, Elías Piña, debido a las restricciones sanitarias impuestas por el Ministerio de Defensa a raíz de un supuesto brote de antrax en Haití.
El Ministerio de Agricultura y el Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza (Cesfront) han prohibido la entrada de productos agrícolas, carnes crudas y alimentos cocinados desde Haití hacia el territorio dominicano. Esta medida ha generado una fuerte molestia entre los ciudadanos haitianos.
Los haitianos han impedido el paso de compatriotas que intentaban regresar con productos dominicanos adquiridos. Un ciudadano haitiano expresó su frustración diciendo: “Si los dominicanos no quieren que nosotros llevemos nada, entonces nadie puede entrar a Haití”. Además, han bloqueado el paso fronterizo, argumentando que no es justo que puedan comprar productos, pero no venderlos.
La situación en el Carrizal se ha vuelto tensa debido al deseo de los haitianos de regresar a su país con las mercancías compradas.
En Dajabón, los militares fronterizos aplican un monitoreo más riguroso en las entradas al mercado fronterizo. Sin embargo, no se ha observado la implementación del control sanitario prometido por el Ministerio de Salud Pública, que se había anunciado para abordar el posible brote de antrax.
En Dajabón, los haitianos, divididos por género, son revisados por el Cesfront para evitar la entrada de carnes y alimentos cocinados desde Haití. El protocolo de seguridad del Ministerio de Defensa incluye la inspección de todos los productos que ingresan al país.
El Ministerio de Defensa ha activado medidas preventivas para proteger a la población dominicana frente al brote de antrax en Haití. Estas medidas incluyen controles sanitarios estrictos y una vigilancia epidemiológica intensificada en la zona fronteriza.
El Ministerio de Salud se mantiene en contacto constante con organismos internacionales, como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), para seguir de cerca la evolución del brote y garantizar una respuesta adecuada.