RDÉ DIGITAL, WASHINGTON.- Este lunes, congresistas republicanos lanzaron un procedimiento formal para destituir al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, justo al inicio de la convención demócrata. Aunque el anuncio ha captado atención, es improbable que el procedimiento avance significativamente.
Los tres comités de la Cámara de Representantes, donde los republicanos tienen mayoría, acusan a Biden de corrupción debido a los negocios internacionales de su hijo Hunter Biden. Jim Jordan, presidente del comité judicial, afirmó que la investigación demostrará “de manera concluyente” que Biden ha “abusado de su cargo público para el beneficio financiero de su familia y sus asociados”.
James Comer, presidente del comité de supervisión, agregó: “El legado del presidente Biden está marcado por abuso de poder, corrupción y obstrucción. Las pruebas de nuestra investigación representan el caso de destitución más sólido que la Cámara de Representantes haya considerado jamás”.
Sin embargo, el informe se basa en insinuaciones y no presenta pruebas directas de que Biden haya usado su cargo para beneficiar a su hijo o participado en sus negocios. Biden, quien dará un discurso en la convención demócrata para apoyar a su vicepresidenta Kamala Harris, ha negado repetidamente cualquier implicación en los negocios de Hunter en Ucrania o China.
Durante años, los republicanos han intentado vincular los negocios de Hunter y sus problemas de adicción para presionar al presidente. Hasta ahora, ningún procedimiento de destitución ha avanzado lo suficiente para ser votado en la Cámara de Representantes.
Algunos interpretan estos intentos como una represalia por los dos juicios políticos enfrentados por el expresidente Donald Trump. Con una mayoría ajustada en la Cámara de Representantes, es poco probable que los republicanos consigan la unanimidad necesaria para destituir a Biden.
