RDÉ DIGITAL, EE. UU.- Un juez federal de Texas suspendió este lunes una política del gobierno del presidente Joe Biden que otorgaría estatus legal a los cónyuges de ciudadanos estadounidenses sin necesidad de salir del país. Esta decisión representa un revés temporal a una de las acciones presidenciales más significativas en años para facilitar el acceso a la naturalización.
El juez de distrito J. Campbell Barker, quien fue nombrado por el expresidente Donald Trump en 2019, ordenó la suspensión tras una demanda de 16 estados con fiscales republicanos que impugnaron el programa, argumentando que el gobierno federal eludió al Congreso con fines políticos.
El programa, anunciado por Biden en junio, podría beneficiar a aproximadamente 500,000 inmigrantes que ya se encuentran en el país, así como a cerca de 50,000 de sus hijos. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) había comenzado a aceptar solicitudes una semana antes de la suspensión, que tiene una vigencia inicial de dos semanas, aunque podría extenderse.
El Estado de Texas, uno de los líderes en la impugnación, afirmó en la demanda que ha tenido que asumir costos significativos en atención médica y seguridad policial debido a los inmigrantes que viven sin estatus legal.
La decisión del juez Barker establece un cronograma para una resolución antes de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre o antes de que el nuevo mandatario asuma en enero. El programa ofrece a los cónyuges de ciudadanos estadounidenses una vía para naturalizarse, permitiéndoles solicitar una tarjeta de residencia sin salir del país, evitando así la separación de familias.
El DHS no ha respondido aún a la solicitud de comentarios sobre la suspensión. Mientras tanto, defensores de los inmigrantes han expresado su preocupación por el impacto de la decisión en miles de familias que podrían haberse beneficiado del programa.
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, aplaudió la decisión del juez, indicando que seguirán luchando por el Estado de derecho. Los inmigrantes interesados en el programa deben cumplir ciertos requisitos, como haber vivido en Estados Unidos durante al menos 10 años y no tener antecedentes delictivos.