RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- Ante las dificultades que enfrentan pacientes de cáncer de todo el país que deben trasladarse a la capital para recibir tratamientos de quimioterapia y radioterapia, la diputada y cantante Juliana O’Neal presentó un proyecto de ley que busca establecer casas de acogida temporales gratuitas, financiadas por el Estado.
La iniciativa está diseñada para aliviar la carga económica y emocional de estos pacientes, quienes suelen venir de provincias remotas y en condiciones económicas limitadas.
Juliana, conocida también por su trayectoria como sobreviviente de tres tipos de cáncer, detalló la propuesta en el podcast “Deyanira en Alta Voz” durante una entrevista en el marco del mes de la lucha contra el cáncer. La legisladora argumentó que, para muchos pacientes, el costo y desgaste de los viajes de ida y vuelta desde el interior para realizarse pruebas y terapias en Santo Domingo resultan insostenibles.
“Es imposible que si usted vive en Pedernales y viene a Santo Domingo a hacerse un estudio o hacerse su terapia, y si tiene la presión alta o un problema con la receta, deba regresar a Pedernales y volver al otro día al hospital oncológico”, explicó.
La propuesta de O’Neal se inspira en las Casas de Acogida Face, dos instalaciones privadas en Santo Domingo y Santiago que ya ofrecen alojamiento temporal a pacientes de bajos recursos, aunque sin recibir fondos del Estado.
Al narrar sus propias experiencias de tratamiento, la diputada recordó cómo, al enfrentar el cáncer de mama en 2019, su seguro médico privado se agotó y tuvo que recurrir al seguro subsidiado, incluso vendiendo su vehículo para cubrir algunos gastos.
“Fue allí cuando entendí de cerca las dificultades de tantos otros pacientes y desde entonces lucho por mejorar la cobertura”, agregó.
La diputada también enfatizó la necesidad de reformar la Ley de Seguridad Social para que incluya una mayor cobertura para enfermedades catastróficas, señalando que los trámites burocráticos, como la corrección de detalles en una receta, pueden retrasar el tratamiento de los pacientes y agravar su estado de salud.
“Es una burocracia que amerita ser modificada en la Ley de Seguridad Social”, afirmó.