RDÉ DIGITAL, WASHINGTON.- La Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos analiza una posible suspensión temporal de vuelos hacia Haití tras los incidentes del lunes en los que dos aviones comerciales, uno de Spirit Airlines y otro de JetBlue, fueron alcanzados por disparos durante sus maniobras en el aeropuerto de Puerto Príncipe. Funcionarios relacionados con la medida informaron a la cadena ABC que la decisión final se anunciará este martes.
En respuesta a la inseguridad que afecta a Haití, República Dominicana también ha cerrado su espacio aéreo para vuelos hacia el país vecino. Aunque la cancillería haitiana solicitó la reapertura, el presidente Luis Abinader ratificó que esta decisión se mantendrá hasta que mejore la seguridad en Haití.
El lunes, un vuelo de Spirit Airlines procedente de Fort Lauderdale intentaba aterrizar en el Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture en Puerto Príncipe cuando fue alcanzado por cuatro disparos. La Oficina Nacional de Aviación Civil de Haití (OFNAC) confirmó que el avión abortó el aterrizaje y desvió su ruta hacia Santiago de los Caballeros en República Dominicana, donde aterrizó sin mayores incidentes. Aunque ningún pasajero resultó herido, un miembro de la tripulación sufrió lesiones menores y recibió atención médica.
Por su parte, un vuelo de JetBlue con destino a Nueva York fue impactado en el fuselaje por un disparo mientras despegaba. Ante el riesgo que representa la situación en Haití, la aerolínea suspendió todos sus vuelos hacia y desde Puerto Príncipe hasta el 2 de diciembre.
Estos incidentes se producen en medio de una crisis de seguridad agravada en Puerto Príncipe, donde las pandillas han intensificado sus ataques en áreas estratégicas, como los alrededores del palacio nacional. La embajada de Estados Unidos en Haití emitió una alerta a sus ciudadanos instando a evitar los viajes hacia el país debido al alto riesgo de violencia.
Si la FAA confirma la suspensión de vuelos, Haití enfrentará un desafío mayor en su ya limitada conectividad aérea en un contexto de creciente inestabilidad. Las autoridades locales y la comunidad internacional monitorean la situación en Puerto Príncipe para evaluar medidas adicionales que garanticen la seguridad de quienes necesitan viajar hacia o desde el país.
