RDE DIGITAL, SANTIAGO.– La Asociación Dominicana de Profesores (ADP) mantiene, por tercer día consecutivo, la suspensión parcial de la docencia en las escuelas públicas de la parte occidental de Santiago. La medida afectó a 17 mil estudiantes de 36 centros educativos, impidiendo que recibieran el pan de la enseñanza.
El gremio magisterial exige el nombramiento de profesores, porteros, conserjes y personal administrativo, además de demandar la finalización de varios centros educativos en proceso de construcción. A raíz de estas exigencias, la ADP anunció el pasado martes una serie de movilizaciones en la provincia de Santiago en busca de reivindicaciones para el sector educativo y para los estudiantes.
En caso de no recibir respuestas satisfactorias a sus demandas, la ADP adelantó que dará a conocer un nuevo plan de acción en los próximos días.
La falta de clases ha generado un impacto económico significativo. Según la organización Acción Empresarial para la Educación (EDUCA), cada día sin docencia representa una pérdida aproximada de 760 millones de pesos. Enrique Darwin Caraballo, director ejecutivo de EDUCA, destacó que esta situación, además de afectar la calidad educativa, representa “una inversión perdida” por parte del Estado, dado que los recursos destinados a la educación no están siendo aprovechados debido a las paralizaciones.
Despido de más de 600 docentes
En medio de las protestas, el Ministerio de Educación (MINERD) desvinculó a más de 600 maestros debido a faltas graves, como el abandono del cargo y el cobro de salarios sin trabajar. De los despedidos, 348 maestros solicitaron su cancelación voluntaria, mientras que 279 fueron separados de manera forzosa.
Una investigación reveló que algunos de estos docentes estaban trabajando fuera del país o desempeñando otras actividades, mientras recibían salarios entre RD$70,000 y RD$90,000 mensuales. En su lugar, se les pagaba a sustitutos entre RD$6,000 y RD$9,000 mensuales para cubrir sus puestos.
Protestas recurrentes de la ADP
Durante el presente año, la ADP ha realizado cerca de una decena de paros nacionales, que han afectado a aproximadamente 2.6 millones de estudiantes de los niveles Inicial, Primaria, Secundaria y la Modalidad de Adultos. Las razones de estas manifestaciones continúan siendo las mismas: aumento salarial, pensiones y otras reivindicaciones laborales para los educadores.
La situación sigue generando preocupación entre los sectores educativos y empresariales, mientras se espera que las autoridades logren encontrar una solución que beneficie tanto a los estudiantes como a los docentes.