RDÉ DIGITAL,SANTO DOMINGO.- En un hito para el desarrollo regional, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ha relanzado su estrategia con una inversión significativa para maximizar su impacto en Latinoamérica y el Caribe. Durante las recientes Asambleas de Gobernadores en Punta Cana, se aprobaron transformaciones claves respaldadas por una capitalización de 3,500 millones de dólares.
La nueva Estrategia Institucional para el periodo 2024-2030 marca un enfoque ambicioso, con objetivos claros y un presupuesto sustancial para respaldarlos. Con tres metas fundamentales – reducir la pobreza y la desigualdad, abordar el cambio climático y fomentar el crecimiento regional sostenible – el Grupo BID ha destinado recursos considerables para su consecución.
En siete áreas estratégicas, desde biodiversidad hasta integración regional, se llevarán a cabo acciones concretas. La inversión en capacidad financiera permitirá a BID Invest ampliar su alcance, canalizando recursos desde los actuales 8,000 millones de dólares anuales hasta aproximadamente 19,000 millones de dólares, consolidando así su compromiso con el desarrollo sostenible.
En un contexto donde la República Dominicana asume la presidencia pro tempore de las Asambleas de Gobernadores, se destaca la visión de liderazgo del país en las conversaciones estratégicas hasta la reunión de Chile en 2025. Este rol posiciona a la nación como facilitadora de decisiones clave para el futuro del desarrollo en la región.
Además, el informe del BID revela datos económicos alentadores para Latinoamérica. Con un crecimiento del 2.1 % en 2023, la región ha superado las expectativas, marcando una recuperación robusta después de los desafíos de la pandemia. Las políticas fiscales y la reacción oportuna de los bancos centrales se han traducido en resultados positivos.
El Grupo BID espera que estas reformas y esfuerzos optimicen sus balances, aumentando su capacidad de financiamiento en hasta 112,000 millones de dólares en la próxima década.
Esta ambiciosa inversión no solo refuerza el papel del BID como motor del desarrollo, sino que también posiciona a la región para un futuro más próspero e inclusivo.