RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) ha emitido un comunicado detallando la producción de agua potable durante la última semana de marzo, alcanzando la cifra de 413.24 millones de galones diarios. Esta información se acompaña de análisis sobre el estado de las presas y los niveles de caudal en la región.
Según la CAASD, las recientes lluvias han mantenido las presas de Valdesia y Jigüey en niveles operativos normales, mientras que el caudal del río Nizao se ha registrado en 4.12 m3 por segundo, una cifra considerada baja en comparación con la demanda de agua potable y riego agrícola, que es de aproximadamente 16 m3 por segundo.
La institución advierte que durante este período de sequía, es común que la producción de agua tienda a disminuir, afectando parcialmente a sectores como el Distrito Nacional, Santo Domingo Oeste, Este, Pantoja, Los Girasoles, Los Alcarrizos y Pedro Brand.
En cuanto al estado de las presas, la CAASD informa que Valdesia se encuentra a 147.36 metros sobre el nivel medio del mar (MSNM) de su capacidad máxima de 150 metros, mientras que Jigüey está a 535.10 MSNM de su tope máximo de 541.50 MSNM.
Para hacer frente a estos desafíos, la CAASD implementó un plan de contingencia que incluye la disponibilidad de 95 unidades de camiones cisterna alquilados, además de su flotilla existente, con el objetivo de aumentar la distribución de agua potable en áreas con problemas de abastecimiento.
En términos de mantenimiento y corrección de averías, la CAASD reportó que durante el periodo del 20 al 26 de marzo se solucionaron 215 averías en las redes de distribución en diferentes sectores del Gran Santo Domingo, mejorando así la calidad del servicio.
La entidad reitera que su personal técnico opera las 24 horas del día y recuerda a la población que las solicitudes y reportes pueden realizarse a través del centro de atención telefónica o de las redes sociales oficiales.
Finalmente, la CAASD hace un llamado a la población para hacer un uso racional del agua, priorizando su uso en labores esenciales domésticas y evitando el desperdicio en actividades como el lavado de vehículos y el riego de plantas de manera innecesaria.