RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- El ministro de la Vivienda, Carlos Bonilla, se encuentra bajo escrutinio tras la adjudicación de contratos por RD$2,590 millones de pesos a María Isabel Terán Bonetti, presidenta de la empresa SERVIAMED DOMINICANA S.R.L., quien admitió haber cometido fraude contra el Estado en el conocido Caso Medusa.
Este caso de corrupción, que involucró a varios exfuncionarios del gobierno anterior y empresarios, generó controversia debido a la decisión del Ministerio de la Vivienda (MIVEH) de otorgar estos contratos a una implicada en el escándalo.
María Teresa Terán Bonetti acordó con el Ministerio Público devolver RD$84,903,951.72 pesos al Estado, correspondientes a sobornos que admitió haber entregado a Enrique Bonetti, destinados supuestamente a Jean Alain Rodríguez, principal acusado en el Caso Medusa. Este caso expuso una red de corrupción y sobornos en la Procuraduría General de la República.
La adjudicación de los contratos a Terán Bonetti por parte del MIVEH, para la adquisición e instalación de equipos médicos y mobiliarios del Hospital Docente Padre Billini, ha suscitado dudas sobre la transparencia y las prácticas del Ministerio.
A pesar de su implicación en el Caso Medusa, Terán Bonetti y su empresa no fueron bloqueados como proveedores del Estado, lo que contrasta con la acción tomada en otros casos de corrupción.
El equipo de investigación de Panorama descubrió estos contratos, lo que ha incrementado las críticas hacia el ministro Carlos Bonilla por su manejo de los recursos del Estado y su decisión de adjudicar contratos millonarios a una persona involucrada en un escándalo de corrupción.
Este incidente pone en tela de juicio la integridad de las prácticas del MIVEH y la efectividad de las medidas de control para prevenir actos de corrupción en la administración pública.
