RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.– La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha destacado un contexto persistente de racismo y xenofobia en la República Dominicana, dirigido especialmente contra personas haitianas y dominicanas de ascendencia haitiana. En su informe sobre los derechos humanos, la comisión denunció la negación de la nacionalidad a estas personas debido a una discriminación estructural.
Según el informe, 34,000 personas aún no han recuperado sus documentos de identidad dominicanos a pesar de la implementación de la Ley 169-14 en 2014, que debía restituir la nacionalidad dominicana de manera expedita y sin requisitos adicionales a las personas afectadas por la sentencia TC/0168/13.
La CIDH también destacó que persisten las hostilidades contra quienes defienden el derecho a la nacionalidad de las personas dominicanas de ascendencia haitiana. Además, señaló un aumento del racismo y la xenofobia en el país.
El informe mencionó denuncias sobre la expulsión de mujeres haitianas embarazadas y lactantes, junto con sus hijos, desde la República Dominicana. Según estas denuncias, la Dirección General de Migración (DGM) realiza operativos de control migratorio en hospitales, afectando desproporcionadamente a mujeres haitianas o dominicanas de ascendencia haitiana en estado de embarazo, la mayoría de las cuales son afrodescendientes.
El documento señaló que la DGM ha llevado a cabo expulsiones de mujeres embarazadas, niñas, niños y adolescentes haitianos. Estas expulsiones hacia puntos fronterizos con Haití fueron catalogadas como actos de discriminación racial.
La CIDH expresó su preocupación por la situación de las personas haitianas y dominicanas de ascendencia haitiana, quienes, en su mayoría, son afrodescendientes. El informe indica que estas situaciones reflejan un contexto de discriminación racial histórica en la República Dominicana, derivado del legado del racismo, colonialismo y esclavitud.
Además, el informe mencionó que 799 personas inscritas en el Plan Nacional de Regularización de Extranjeros en situación migratoria irregular (PNRE) aún no han recibido documentos que prueben su nacionalidad, a pesar de obtener el decreto presidencial de naturalización. Unas 1,000 personas más están a la espera de dichos decretos.
La CIDH subrayó la necesidad urgente de abordar estas cuestiones para garantizar los derechos humanos de las personas haitianas y dominicanas de ascendencia haitiana, y para combatir el racismo y la xenofobia en la República Dominicana.
