RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- El Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) manifestó hoy su preocupación por la situación fiscal de la República Dominicana, destacando que los ingresos proyectados cada año son inferiores a los gastos.
César Dargam, vicepresidente ejecutivo del Conep, explicó que los ingresos estimados para este año representan aproximadamente el 17 % del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que los egresos ascienden al 20 %, generando un déficit fiscal del 3 % desde el inicio del año.
Dargam señaló que este déficit, sumado a las deudas con el Banco Central, eleva el déficit total al 5 % del PIB. «El gobierno gasta más de lo que recibe, lo que ha generado la necesidad de financiamiento», afirmó el empresario.
Incentivos insuficientes y evasión fiscal
Uno de los temas destacados por Dargam es la baja proporción de incentivos que reciben sectores clave como el turismo, el cual percibe solo el 0.5 % del PIB, equivalente a 12,570 millones de pesos.
Además, señaló que el 40 % del total de los incentivos tributarios se destina al ITBIS de personas físicas, calificándolo como un «elefante en el salón» que requiere atención.
Dargam también destacó que un tercio de las recaudaciones fiscales proviene del ITBIS, pero advirtió que la eficiencia recaudatoria es baja.
«De cada peso que debería recaudarse, solo se están obteniendo 34 centavos, y casi 50 centavos se pierden debido al comercio ilícito, la evasión y la informalidad», explicó, subrayando la necesidad de mejorar la eficiencia en la recaudación tributaria para evitar pérdidas significativas.
Déficit en el sector eléctrico
Dargam también expresó preocupación por el déficit en el sector eléctrico, que se aproxima a los 2,000 millones de dólares, lo cual agrava aún más la situación fiscal del país.
En cuanto a la reforma fiscal, el representante del Conep coincidió con el gobierno en la necesidad de proteger a los sectores más vulnerables.
Además, mencionó los avances logrados hacia una modificación profunda del Código de Trabajo, especialmente en el esquema de cesantía, que consideró como una carga que afecta la competitividad de las empresas. También abogó por la implementación de la facturación electrónica y una mejor coordinación entre las autoridades recaudatorias.
