Por Jeimy Moquete
RDÉ DIGITAL, MARYLAND.– El Gobierno de los Estados Unidos presentó una acusación formal contra cuatro mujeres por facilitar el fraude de visas al organizar matrimonios falsos entre inmigrantes y ciudadanos estadounidenses, con el fin de ayudar a los extranjeros a obtener residencia permanente a cambio de dinero.
La investigación, que comenzó en 2022, resultó en cargos federales contra Ella Zuran, de 65 años, Tatiana Sigal, de 74, y Alexandra Tkach, de 41, residentes de Nueva York; junto con Shawnta Hopper, de 33 años, de Sicklerville, Nueva Jersey.
Las acusadas emparejaron a ciudadanos estadounidenses con inmigrantes que vivían ilegalmente en el país, buscando beneficios de inmigración a los que no tenían derecho, como la residencia permanente. Si son declaradas culpables, enfrentan hasta cinco años de prisión federal, según el ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas).
En una nota de prensa publicada este lunes, el ICE informó que se arrestaron administrativamente a 10 personas el 24 de abril y se revocaron los beneficios de inmigración de los involucrados. La investigación involucró al ICE de Maryland, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS), el Servicio de Seguridad Diplomática del Departamento de Estado y la Oficina del Fiscal Federal de Maryland.
La investigación comenzó en abril de 2022, cuando el Grupo de Trabajo de Fraude de Documentos y Beneficios/El Dorado de HSI Maryland comenzó a investigar a personas sospechosas de organizar matrimonios falsos para obtener beneficios de inmigración. A través de entrevistas con los funcionarios de la Oficina de Detección de Fraudes y Seguridad Nacional, los ciudadanos estadounidenses que actuaron como peticionarios admitieron su participación en el fraude a cambio de una compensación financiera.
En marzo de 2025, la oficina del HSI en Maryland acusó y arrestó a Zuran, Sigal y Tkach por orquestar esquemas matrimoniales fraudulentos para ayudar a ciudadanos extranjeros a obtener residencia permanente. Las tres mujeres pagaron miles de dólares para facilitar las presentaciones entre los ciudadanos estadounidenses y coordinar bodas falsas, además de preparar formularios de inmigración falsos.
La cuarta mujer, Shawnta Hopper, fue acusada de alentar a varios ciudadanos estadounidenses a participar en matrimonios fraudulentos a cambio de ganancias financieras. Hopper recibía compensación por reclutar mujeres en Baltimore y otras localidades para celebrar estos matrimonios falsos.
“Algunos matrimonios se hacen en el cielo. Algunos simplemente son inventados”, declaró Matthew Tragesser, portavoz del USCIS. “Nuestro trabajo con ICE en esta investigación desmanteló una importante red de fraude matrimonial donde se pagaba a ciudadanos estadounidenses para que se casaran con extranjeros ilegales”, agregó.
Por su parte, Michael McCarthy, agente especial a cargo de ICE HSI Maryland, señaló: “El fraude matrimonial no es un crimen sin víctimas, compromete la integridad de nuestro sistema de inmigración, desvía recursos críticos y erosiona la confianza pública en un proceso que innumerables personas siguen legalmente y de buena fe”.
