RDÉ DIGITAL, ESTADOS UNIDOS.- Donald Trump inició su mitin este sábado en Butler, Pensilvania, retomando el discurso interrumpido el pasado 13 de julio por un tirador, que resultó en la muerte de un simpatizante y que le provocó una herida en la oreja.
“Como estaba diciendo…”, comenzó Trump, mostrando en una pantalla gigante un gráfico sobre la entrada de inmigrantes sin papeles, afirmando que le salvó la vida al girar la cabeza para verlo justo en el momento de los disparos. “Amo ese gráfico”, dijo el expresidente ante sus seguidores.
El mitin se llevó a cabo en el mismo lugar al aire libre del intento de asesinato, donde Trump se dio un baño de masas, buscando sacar rédito político de aquel atentado. Junto a él estaba Elon Musk, el hombre más rico del mundo, quien también complementó con sus propios bulos los que soltó el candidato republicano.
Trump apeló a la audiencia, diciendo: “Hace 12 semanas todos recibimos una bala por Estados Unidos y lo único que pedimos es que todo el mundo salga a votar. Tenemos que ganar. No podemos dejar que esto le pase a nuestro país. No podemos aguantar otros cuatro años así. No nos quedará país. No nos quedará un país. Y todo esto será para nada”.
El expresidente pidió un minuto de silencio a las 18:11, hora local, coincidiendo con el momento del atentado del 13 de julio. Una campana sonó en homenaje a Corey Comperatore, la víctima mortal de aquel día.
Trump declaró que “aquellos que quieren detenernos… me han calumniado, me han procesado políticamente, me han acusado, han tratado de echarme de la boleta electoral y, quién sabe, tal vez incluso trataron de matarme”, calificando a sus oponentes políticos de “enemigo interior” y sugiriendo que podían haber estado tras su atentado.
Su hijo, Eric Trump, apuntó en la misma dirección, refiriéndose a los ataques políticos con un “ellos” que usó también para el atentado, a pesar de que todos los indicios apuntan a que el autor actuó en solitario.
“Ellos intentaron quitarnos a alguien a quien todos queremos. Ellos intentaron desprestigiarnos. Ellos nos persiguieron. Ellos le procesaron políticamente dos veces… Y luego, ellos intentaron matarle. Ellos intentaron matarle. Y es porque el Partido Demócrata no puede hacer nada bien”, afirmó.
En julio, cuando Trump sufrió el atentado, tenía a Joe Biden como rival en las presidenciales y el camino hacia la Casa Blanca parecía despejado. La entrada en escena de Kamala Harris cambió la dinámica de campaña.
Con su regreso a Butler para explotar políticamente el intento de asesinato, el expresidente parece querer recuperar las buenas vibraciones que tenía en julio. “Pensilvania, es hora de ponerse de pie por Estados Unidos y es el momento de salvar a nuestro país”, dijo Trump.
Durante el mitin, Trump hizo afirmaciones infundadas sobre que en todo el mundo se están vaciando las cárceles para enviar a sus “asesinos, traficantes de drogas, tratantes de personas y miembros de bandas” a Estados Unidos como inmigrantes. “Los están liberando a todos en nuestro país, y están vaciando sus cárceles”, sostuvo, justo antes de dar paso a Elon Musk.
Elon Musk participó en el mitin
Musk saltó, literalmente, al escenario con una camiseta que decía “Ocupar Marte” y una gorra con el lema trumpista Make America Great Again. En su primera intervención en un acto de campaña, el multimillonario señaló que los demócratas quieren acabar con la libertad de expresión y con el derecho a llevar armas, y arrebatar a los estadounidenses el derecho al voto.
“Si la gente no sabe lo que está pasando, si no saben la verdad, ¿cómo pueden hacer un voto informado?”, dijo el dueño de la red social X, en la que tiene 200 millones de seguidores.
Musk también hizo un juego de palabras no muy afortunado apelando al uso de armas de fuego para defender la libertad de expresión, consagrada en la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
“Necesitas tener libertad de expresión para tener democracia. Por eso tenemos la Primera Enmienda y la Segunda Enmienda [que recoge el derecho a llevar armas de fuego] está ahí para asegurarnos de que tenemos la Primera Enmienda”, explicó. Según Musk, “es necesario que gane Trump para preservar la democracia en Estados Unidos”. Si no gana, se lanzó a decir sin fundamento alguno, “estas serán las últimas elecciones. Esa es mi predicción”, dijo.
Musk elogió la respuesta de Trump ante el intento de asesinato del 13 de julio, afirmando que “la verdadera prueba del carácter de alguien es cómo se comporta bajo el fuego. Y tenemos un presidente que no puede subir un tramo de escaleras [en referencia insultante a Joe Biden] y otro que estaba levantando el puño tras recibir un disparo. ‘Luchad, luchad, luchad’, [dijo] con la sangre corriendo por su cara. Estados Unidos es la tierra de los valientes”. Entre el público, muchos llevaban carteles y camisetas con ese lema.
Tras los cerca de seis minutos de intervención del hombre más rico del mundo, Trump continuó su discurso, que en total duró cerca de hora y media. En el tramo final, volvió a referirse a su invitado estrella: “Necesitamos recuperar el sueño americano, ¿verdad? Vamos a tener el sueño americano, de modo que cada niño en su familia va a crecer y decir: ‘Quiero ser como Elon Musk. Quiero tener 200.000 millones en efectivo. Voy a ser como Elon Musk’. Este es el sueño americano. Pero para que eso suceda, debemos derrotar a Kamala Harris”, sostuvo.
Varios teloneros del mitin, incluido su hijo Eric y la mujer de este, Lara, presentaron la supervivencia de Trump como una demostración de la voluntad de Dios. Antes de su salida a escena, se proyectó un vídeo que comparaba esa supervivencia con la de George Washington cruzando el río Delaware, uno de los mitos de la revolución que dio lugar al nacimiento de Estados Unidos. La animación incluyó actuaciones musicales en directo, una nueva canción country sobre el atentado, paracaidistas y un sobrevuelo del avión privado de Trump.
El mitin se celebró a falta de un mes para las elecciones del 5 de noviembre. Trump ya relató los detalles de lo ocurrido en el atentado en la convención republicana celebrada en Milwaukee, días después del mismo.
Aseguró, no obstante, que sería la única vez que lo haría, es decir, que no volvería a rememorar públicamente esa experiencia. “Les contaré lo que pasó, y nunca lo oirán de mí una segunda vez, porque es demasiado doloroso contarlo”, dijo. Sin embargo, ha seguido contándolo como parte de su campaña hasta volver este sábado a la escena del crimen.
Desde horas antes del comienzo del mitin, el espacio al aire libre estuvo abarrotado de seguidores del expresidente. La seguridad se reforzó notablemente en comparación con el mitin de julio.
