Por Jeimy Moquete
RDÉ DIGITAL, CANNES.- El Festival de Cannes ha reforzado este año su ya estricta normativa sobre la alfombra roja, al prohibir expresamente la desnudez, “por razones de decencia”, y los trajes con grandes volúmenes, que dificultan el movimiento de los invitados y la organización dentro del recinto. Las medidas, detalladas en una carta oficial enviada a los participantes, buscan mantener el decoro y asegurar el correcto desarrollo de las sesiones de gala.
La actriz Juliette Binoche, presidenta del jurado de la competencia oficial, y Halle Berry, también miembro del jurado, se mostraron de acuerdo con las nuevas disposiciones. “Es una gran idea que no sea obligatorio llevar tacones altos”, expresó Binoche en una rueda de prensa, mientras Berry reveló que tuvo que modificar su vestido para ajustarse a la normativa sobre el volumen del atuendo. Sobre la restricción a la desnudez, la actriz estadounidense consideró que es “una buena regla”.
Normas estrictas sobre vestimenta y comportamiento
El código de vestimenta para las funciones de gala, que se celebran a las 19:00 y 22:00 horas, exige vestimenta de noche: vestidos largos o esmóquines, aunque también se permite el uso de un vestido de cóctel, traje pantalón oscuro con blusa elegante o un traje negro o azul marino con pajarita o corbata. El calzado debe ser elegante, aceptándose sandalias con o sin tacón.
El comportamiento durante el desfile por la alfombra roja también está regulado, reforzando la imagen de Cannes como un evento de rigor ceremonial. Esta no es la primera vez que el festival genera debate por sus normas; en 2016, la actriz Julia Roberts acaparó titulares al descalzarse en señal de protesta por la entonces obligatoria exigencia de tacones altos.
Control reforzado y protocolo claro
La organización del certamen ha publicado estas directrices en su página web, recordando que toda persona que acceda al Grand Théâtre Lumière debe cumplir con los requisitos establecidos. La medida busca equilibrar la libertad estética con el respeto al evento y la logística necesaria para su adecuado desarrollo.
Con estas nuevas disposiciones, Cannes refuerza su imagen como uno de los festivales más prestigiosos, pero también más exigentes del mundo del cine.
