RDÉ DIGITAL, HAITÍ (EFE).- La Policía Nacional de Haití se enfrentó el lunes a un grupo armado que intentaba tomar el control de Solino, una de las pocas comunidades de la capital, Puerto Príncipe, que no está bajo el dominio de pandillas.
Desde el jueves, los residentes de Solino han pedido auxilio a través de estaciones de radio mientras huían de sus hogares. Según un comunicado de la policía, los agentes han recuperado varias zonas y continúan persiguiendo a los pandilleros.
Un video difundido en redes sociales muestra a miembros de la coalición de pandillas conocida como «Viv Ansanm» alzando armas automáticas, afirmando que habían tomado partes de Solino y advirtiendo que quienes no se unan a ellos serán «reducidos a cenizas».
Esta coalición, formada en septiembre de 2023, ha atacado otros vecindarios, como Tabarre 27, provocando la huida de más de 4.200 personas, según un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), parte de la ONU.
Más del 60 % de los desplazados se han refugiado en albergues improvisados, mientras otros buscan refugio en escuelas, iglesias y centros de salud.
La violencia ha afectado también a periodistas que cubren estos conflictos, quienes han sido amenazados por las pandillas.
«Viv Ansanm», una alianza entre dos antiguas pandillas rivales, ha concentrado sus esfuerzos en actividades criminales y en enfrentarse a las fuerzas de seguridad haitianas y a la misión de pacificación liderada por policías kenianos, respaldada por la ONU.
Aunque los enfrentamientos entre pandillas disminuyeron un 78 % de marzo a agosto de 2024, el control de las pandillas sobre Puerto Príncipe sigue siendo fuerte, abarcando el 80 % de la ciudad.
