RDE DIGITAL, SANTO DOMINGO.- En el escenario del atletismo, Félix Sánchez, doble campeón olímpico en 400 metros vallas, emerge como una leyenda que marcó una era. Sin embargo, su atención se dirige ahora hacia Marileidy Paulino, la campeona mundial de 400 metros, quien se convierte en el estandarte de una generación que proyecta un crecimiento significativo de la República Dominicana de cara a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028.
Sánchez, retirado desde 2016, se dedica a su academia de atletismo en Santo Domingo y a representar a su país en eventos internacionales. Ha participado en la presentación de la estrategia nacional de turismo en FITUR y en la Casa Dominicana para los Juegos de París 2024.
La academia de Sánchez, que actualmente cuenta con treinta atletas, se plantea la posibilidad de trasladarse a una zona turística, como Punta Cana o Cap Cana, en busca de un entorno más propicio. Entre sus atletas se destaca Aleix Porras, un español de 400 vallas, al que ve con gran potencial para alcanzar los Juegos.
En cuanto a la ausencia de representantes dominicanos en el próximo Mundial de pista cubierta, Sánchez atribuye la dificultad a las diferencias climáticas y de condiciones de pista. Su enfoque está en metas más ambiciosas.
Los destacados para los Juegos Olímpicos incluyen a Marileidy Paulino, Alexander Ogando y Juan Núñez, este último rompiendo el récord juvenil de Sánchez a la temprana edad de 19 años. Marileidy, en particular, se posiciona como la figura principal, una inspiración para la juventud con su dedicación y logros.
Ser una leyenda del atletismo mundial no es tarea fácil de llevar, pero Sánchez espera ver un atleta que supere sus logros, simbolizando el continuo crecimiento del atletismo dominicano. Respecto a Karsten Warholm, lo describe como una “bestia” con un enfoque agresivo que ha transformado la forma de correr, admirando su impacto en el deporte.
Para Sánchez, el futuro prometedor del atletismo dominicano radica en la mejora de las instalaciones y el respaldo gubernamental, así como en motivar a los jóvenes talentosos.
Estos elementos, según él, serán el vehículo que impulsará al país hacia Los Ángeles 2028.