RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- Con motivo del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, que se celebra cada 2 de abril, la Fundación Dominicana de Autismo demandó un incremento en los recursos económicos por parte de las autoridades para poder brindar la asistencia necesaria a los niños con esta condición.
El psicólogo Heisenberg Piña Drullard, coordinador de la fundación, explicó que tanto el proceso de evaluación diagnóstica como el acompañamiento docente y terapéutico tienen altos costos, lo que limita la capacidad de la institución para atender a todas las familias que solicitan apoyo.
“La evaluación diagnóstica, cuando se hace correctamente, es costosa. Uno no puede meterle a una maestra 12 niños con autismo y dejarlas a ella solas, es imposible, dependiendo del autismo que tenga el niño”, afirmó Piña Drullard durante una rueda de prensa.
El coordinador detalló que los niños con autismo requieren hasta seis terapias diferentes, tales como terapia del habla, terapia ocupacional, terapia de regulación sensorial, terapia de aprendizaje y terapia conductual. Cada una de estas intervenciones tiene un alto costo, y en muchos casos, la fundación no puede asistir a todas las madres que se acercan en busca de ayuda.
La fundación destacó la urgencia de crear un protocolo nacional de evaluación para abordar el autismo de manera más eficiente en el país. Según explicó Piña Drullard, esta necesidad ha sido parcialmente cubierta por la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (Sisalril), pero aún falta más colaboración interinstitucional para lograr una atención integral.
En cuanto a la intervención estatal, el coordinador indicó que los niños con autismo a menudo llegan con comorbilidades que requieren tratamientos médicos costosos, los cuales resultan inalcanzables para muchas familias de clase media.
Aunque no especificó el monto exacto del presupuesto que recibe la fundación del gobierno, Piña Drullard subrayó que los recursos no son suficientes, ya que la entidad atiende a unos 200 niños distribuidos en 12 aulas.
Piña Drullard también expresó la necesidad urgente de realizar una estadística oficial sobre la cantidad de niños con autismo en República Dominicana.
Actualmente, los datos disponibles son limitados, por lo que la fundación se basa en estadísticas internacionales, como las del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, que indica que por cada 100 nacimientos, un niño presenta autismo.
Según esta referencia, la incidencia en EE. UU. es de 1 caso cada 36 nacimientos, destacando que hay tipos de autismo que no presentan deterioro cognitivo ni problemas de aprendizaje.
En el país, los casos de autismo aumentan, y Piña Drullard resaltó que cada familia con un niño con autismo enfrenta un impacto significativo a nivel social, económico y psicológico. “No estás hablando solo de una persona con autismo, estás hablando de una familia con autismo, y esa familia se ve afectada en múltiples dimensiones”, agregó.
La fundación hizo un llamado a las autoridades y a la sociedad en general para abordar de manera más eficiente el autismo y sus implicaciones, tanto en la educación como en los tratamientos médicos.
Piña Drullard recalcó que hasta que el gobierno no reconozca “el nivel de crisis” que enfrenta el sistema educativo y de atención a los niños con autismo, no será posible implementar las reformas necesarias.
“Tenemos una ventaja, ya que este tema ha sido largamente estudiado, y sabemos lo que hay que hacer: mejorar la formación de los profesores, los directores y la educación inicial. Lo difícil es la implementación y la economía política detrás de eso. Pero en la medida en que podamos formar mejores profesores y directores, y hacer una inversión efectiva en la primera infancia, veremos una mejora significativa en el sistema educativo”, concluyó Piña Drullard.