RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- A dos semanas del inicio oficial de la temporada de huracanes, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH) comenzó este jueves 15 de mayo la emisión regular de sus boletines sobre la perspectiva del tiempo tropical en la cuenca del Atlántico para 2025.
El boletín inaugural detalla que no se espera formación de ciclones tropicales en los próximos siete días (del 15 al 21 de mayo) en el Atlántico Norte, el mar Caribe ni el golfo de México. Los informes del CNH cubren el periodo comprendido entre el 15 de mayo y el 30 de noviembre de cada año, y ofrecen un análisis detallado de las condiciones atmosféricas y oceánicas que podrían favorecer la formación de sistemas tropicales.
Los reportes se publicarán cuatro veces al día: a las 2:00 a. m., 8:00 a. m., 2:00 p. m. y 8:00 p. m., hora del Este, que coincide con la hora oficial de República Dominicana.
No se esperan ciclones esta semana.
Según el primer parte del CNH, no hay indicios de que se desarrollen ciclones tropicales en el corto plazo. Aun así, la vigilancia temprana permite a los organismos de emergencia y a la población mantenerse informados y preparados ante cualquier cambio súbito en las condiciones meteorológicas.
Esta medida preventiva es común en los últimos años, especialmente ante el incremento en la intensidad y frecuencia de los eventos ciclónicos debido al calentamiento global y al comportamiento anómalo de las temperaturas oceánicas.
Se prevé una temporada por encima de lo normal.
Para este 2025, los investigadores de la Universidad Estatal de Colorado anticipan una temporada de huracanes más activa de lo habitual. En su pronóstico, estiman la formación de 17 tormentas con nombre propio, de las cuales nueve podrían alcanzar la categoría de huracán, y al menos cuatro llegarían a la categoría tres o superior en la escala Saffir-Simpson.
Este aumento en la actividad se atribuye, principalmente, a las temperaturas superiores a lo normal registradas en la superficie del océano Atlántico oriental subtropical y el mar Caribe.
“Cuando las aguas del Atlántico subtropical oriental son mucho más cálidas de lo normal en primavera, tienden a debilitar la alta presión subtropical y los vientos alisios. Estas condiciones contribuyen a mantener temperaturas oceánicas elevadas durante el pico de la temporada”, señala el informe de la universidad.
Estas aguas cálidas no solo alimentan los sistemas ciclónicos, sino que también favorecen una atmósfera más inestable y con menor presión, condiciones que facilitan la formación de huracanes más intensos.