RDÉ DIGITAL, SUIZA.– En un mensaje dirigido a los participantes de la conmemoración por los 500 años del surgimiento de una de las ramas principales de la Reforma protestante, el papa León XIV hizo un llamado a la fraternidad entre cristianos y a la sanación de heridas históricas.
El evento, celebrado en Zúrich, Suiza, reunió a representantes de diversas comunidades cristianas, incluidas aquellas con raíces en el movimiento anabaptista, como los menonitas y los amish.
“En el contexto de nuestro mundo desgarrado por la guerra, nuestro continuo camino de sanación y fortalecimiento de la fraternidad desempeña un papel fundamental”, expresó el pontífice en un comunicado difundido por la Santa Sede.
Agregó que la unidad entre cristianos es clave para un testimonio más eficaz de los valores del Evangelio.
León XIV, quien asumió el pontificado hace menos de un mes, reiteró su visión de construir una “civilización del encuentro y del amor”, subrayando la importancia de reforzar los lazos entre católicos y protestantes.
En su mensaje, destacó también el papel esencial del mandamiento del amor y del servicio al prójimo como base para la reconciliación.
El papa reconoció que la historia compartida entre católicos y menonitas incluye momentos difíciles y conflictos no resueltos que aún influyen en la percepción mutua.
Por ello, instó a una “purificación de la memoria” y a una “relectura común de la historia” como pasos necesarios para avanzar hacia la unidad.
“Solo así el diálogo teológico y pastoral pueden dar fruto, un fruto duradero”, concluyó León XIV, en un discurso que busca consolidar su imagen como promotor del ecumenismo desde los primeros días de su pontificado.
