RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- Celso Marranzini, presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED), informó que durante esta gestión «no hay ni habrá gestión de demanda», aunque admitió que habría preferido aplicarla, como se hizo en gobiernos anteriores.
La gestión de demanda consistía en realizar apagones programados en sectores donde no se paga el servicio, buscando reducir pérdidas y motivar a los residentes a regularizarse. Sin embargo, la decisión de Abinader ha llevado a un aumento de las pérdidas de las empresas Edenorte, Edesur y Edeeste, que pasaron de un 27% en 2019 a un 39% actualmente. Además, el subsidio eléctrico se incrementó de US$610 millones a US$1,584 millones en este año.
Apagones por averías y sobrecarga del sistema
Marranzini aclaró que los apagones actuales no son por gestión de demanda, sino debido al aumento inusual de la demanda de energía provocado por el calor. “El sistema no resiste el suministro constante”, indicó, destacando las malas condiciones de algunos transformadores y redes eléctricas.
También señaló que la falta de inversión en la rehabilitación de redes y compra de medidores durante los últimos años ha contribuido a las averías actuales. Sin embargo, prevé que el servicio se normalice a finales de este mes o principios del próximo, una vez se instalen los transformadores en proceso de reparación.
En cuanto a la generación de energía, Marranzini dijo que para finales de este año se esperan 400 nuevos megavatios de la Compañía Eléctrica Punta Cana-Macao (CEPM) y otros 400 de Energía 2000, lo que permitirá satisfacer la demanda mientras avanzan proyectos en Montecristi.