RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO. – El Ministerio de Educación (Minerd) está evaluando internamente la posibilidad de eliminar las pruebas nacionales como requisito para aprobar el nivel secundario, según informó Oscar Amargós, viceministro de Supervisión y Control de la Calidad.
En declaraciones a Diario Libre, Amargós explicó que para hacer esto una realidad, primero debe haber un consenso interno. Luego, se realizarán consultas con organismos exteriores expertos en educación, como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). Posteriormente, la propuesta se llevará al Consejo Nacional de Educación. Si el consejo aprueba la propuesta, las pruebas nacionales podrían ser eliminadas en el mismo año escolar.
“Se está estudiando y se está consultando la posibilidad de que en el próximo año escolar se eliminen. No podemos decirle que la vamos a eliminar hasta tanto no se cumplan esos procedimientos”, indicó Amargós.
Alternativa a las pruebas nacionales
En caso de eliminarse estas evaluaciones obligatorias, se continuaría con la aplicación de las pruebas diagnósticas, que se imparten desde 2017. A diferencia de las pruebas nacionales, las pruebas diagnósticas no se utilizan para determinar la promoción de un estudiante al siguiente nivel educativo. Sin embargo, sin las pruebas nacionales, las pruebas diagnósticas asumirían el rol de evaluar las deficiencias del sistema educativo, el currículo y las debilidades de los estudiantes, y serían reforzadas para utilizarlas como herramienta de aprobación de curso.
Actualmente, estas pruebas se aplican en tercero y sexto de primaria, y en tercero de secundaria. De ejecutarse los cambios, se aplicarían en otro nivel de secundaria, según indicó Amargós.
Razones para la eliminación
El viceministro explicó que una de las razones para considerar la eliminación de las pruebas nacionales es la capacidad y utilidad demostrada por las evaluaciones diagnósticas. Además, señaló que eliminar estas evaluaciones permitiría que miles de estudiantes continúen con sus estudios superiores, ya que las pruebas nacionales son, para muchos, un impedimento para aprobar el nivel secundario.
Durante un análisis de las políticas educativas, se discutieron las ventajas actuales de las evaluaciones diagnósticas en comparación con las pruebas nacionales, concluyendo que las primeras podrían ofrecer una solución más efectiva y menos restrictiva para el sistema educativo.
