RDÉ DIGITAL, JERUSALEN.- La ONU comunicó el lunes el despido de nueve funcionarios de la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) luego de una investigación interna que sugirió su posible implicación en el ataque de Hamás contra Israel del 7 de octubre.
La oficina del secretario general de la ONU emitió un breve comunicado sin entrar en detalles sobre el papel específico de los despedidos. Entre los nueve afectados, se incluían siete empleados que ya habían sido separados previamente de la agencia a raíz de las denuncias.
La investigación de la ONU, que se activó tras las acusaciones de Israel contra 12 miembros del personal de UNRWA, se centró en el ataque que resultó en la muerte de 1,200 personas y el secuestro de 250 más, y que marcó el inicio de la actual guerra en la región.
Las acusaciones llevaron a que los principales países donantes suspendieran inicialmente su apoyo a UnRWA, creando una crisis financiera de unos 450 millones de dólares. Posteriormente, todos los países donantes, salvo Estados Unidos, reanudaron su financiación.
La Oficina de Servicios de Supervisión Interna de la ONU, que realizó la investigación, utilizó la evidencia proporcionada por Israel y mantuvo diálogos con las autoridades israelíes. La ONU no pudo verificar de manera independiente esta evidencia debido a la falta de acceso directo. La revisión incluyó registros del personal de UNRWA, correos electrónicos y otras comunicaciones internas.
Philippe Lazzarini, director de UNRWA, explicó que se decidió que los nueve empleados no podían continuar en la agencia. Destacó que la prioridad de UNRWA es mantener los servicios esenciales para los refugiados palestinos en Gaza y la región, en medio de la guerra y la inestabilidad. Lazzarini también condenó el ataque del 7 de octubre.
En cuanto a otros casos investigados, las pruebas fueron insuficientes para justificar despidos adicionales, y en un caso no se encontró evidencia de participación.