RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- El Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, mencionó que de los nueve bloques dañados en la prisión, que albergan aproximadamente a 1,500 personas, cuatro colapsaron por completo, lo que llevó a la reubicación de los reclusos a La Vega, San Francisco de Macorís y otras áreas dentro de La Victoria.
Ulloa también señaló que el incidente afectó parcialmente la panadería y la cocina, además de los bloques que se derrumbaron, poniendo en peligro las demás estructuras internas.
Durante una entrevista en el programa El Día con los periodistas Germán Marte y Edith Febles, el Defensor explicó que se requirió el uso de maquinaria pesada para acceder a las áreas dañadas y que actualmente están realizando inspecciones.
“Para acceder a las zonas afectadas, fue necesario utilizar una pala proporcionada por el alcalde de La Victoria. Esto permitió a los bomberos activar sus protocolos de manera más efectiva, ya que inicialmente no podían acceder con los camiones, lo que provocó que el fuego se propagara”, enfatizó.
Ulloa reconoció que esta situación agrava el problema de hacinamiento en la prisión, un problema que ha sido denunciado por años por organismos defensores de los derechos humanos.
El defensor también comentó que La Victoria sufre problemas de acceso y que la infraestructura, originalmente diseñada para albergar a 800 personas, ahora tiene una población que supera las 8,000, lo que dificulta la logística para emergencias.
En cuanto al traslado de los reclusos, la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC) informó que 1,700 presos fueron trasladados a otras prisiones del país después del incendio del lunes, que resultó en tres muertes.
Según el comunicado, 300 reclusos fueron llevados al Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) El Pinito en La Vega, y 100 al CCR Vista al Valle en San Francisco de Macorís, provincia de Duarte. Los restantes 1,300 fueron reubicados en áreas no afectadas dentro de La Victoria.
Se aseguró que se crearán condiciones adecuadas para garantizar la dignidad y habitabilidad de los trasladados.