RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- A pesar de algunos inconvenientes aún pendientes por resolver por parte de la alcaldía de Boca Chica, así como de las dificultades derivadas de la falta de regulaciones en los precios de los productos, comerciantes y autoridades se encuentran preparados para dar la bienvenida a miles de visitantes a partir de hoy y durante este fin de Semana Santa.
“Les pedimos a los bañistas que visiten esta playa ya que tenemos menús visibles para que puedan ver los precios. Aquí tenemos pescado a todo precio dependiendo del tamaño y la calidad. Hay pescado entre 850 y 1000 pesos con mesa incluida”, comentó Jesús Armando Severino, presidente de la Asociación de Comerciantes de la Playa de Boca Chica.
El ambiente en la playa es animado, con una manada de vendedores que ofrecen mesas junto a la playa, así como alimentos y bebidas. Ya desde el día de hoy se observa una buena afluencia de bañistas, algunos ya disfrutando del agua mientras que otros llegan al lugar. Muchos están construyendo castillos de arena en la orilla del mar.
En las mesas bajo las sombrillas, hombres y mujeres disfrutan de pescados fritos con tostones mientras toman cervezas y otras bebidas. Otros, bajo los cocoteros, sacan sus comidas preparadas en casa, como locrio de sardinas, bacalao, pollo horneado, moro de guandules y espaguetis, entre otros platos.
Además de los alimentos, los bañistas pueden encontrar una variedad de productos ofrecidos por vendedores ambulantes, como long play (yaniqueque gigantes), lentes de sol, sombreros, cocos, prendas de acero, inflables para niños, entre otros.
La playa Boca Chica, conocida por su popularidad cualquier día de la semana, experimenta un aumento significativo de visitantes durante los días finales de la Semana Santa. Sentarse en una mesa alquilada o bajo un cocotero a orillas de la playa para disfrutar de música, baile, bebidas y comida, así como de juegos acuáticos y de arena, es una experiencia única que atrae a personas de todas partes.
Aunque la belleza natural de Boca Chica es innegable, se hace evidente la falta de limpieza en el litoral, con botellas de cristal y plástico, vasos foam y otros desperdicios esparcidos por la arena. Sin embargo, para garantizar la seguridad y el orden, se ha habilitado un destacamento de seguridad y emergencia en la playa, compuesto por miembros de la Defensa Civil, el Ejército, la Policía Nacional, Politur (Policía turística) y el 911.