RDÉ DIGITAL, ESTADOS UNIDOS (EFE).- El presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró este miércoles que Estados Unidos no fue informado con antelación sobre la operación militar ucraniana que el domingo pasado dañó varias bases de aviación estratégica rusa, en un ataque que incluyó el uso de drones contra instalaciones en Siberia.
Durante una conversación telefónica sostenida con el presidente ruso Vladímir Putin, Trump reafirmó que no existía coordinación ni conocimiento previo por parte del gobierno estadounidense sobre la acción militar, según informó Yuri Ushakov, asesor del Kremlin para asuntos internacionales.
“Trump confirmó de nuevo que los estadounidenses no se informaron de antemano”, declaró Ushakov en una rueda de prensa telefónica al comentar la cuarta conversación entre ambos líderes desde enero.
Trump, por su parte, calificó el diálogo como “bueno, pero no conducente a una paz inmediata”, e indicó en su plataforma Truth Social que Putin fue enfático en que responderá a los ataques, los cuales, según estimaciones ucranianas y de la OTAN, destruyeron una docena de aeronaves, incluidos bombarderos.
El presidente ruso aprovechó el intercambio para exponer a su interlocutor los resultados de la segunda ronda de negociaciones con Ucrania celebrada esta semana en Estambul, que calificó de “útiles”, a pesar de nuevos episodios de violencia en el frente.
Putin acusó a Kiev de intentar sabotear las conversaciones al ordenar ataques contra civiles y objetivos estratégicos rusos. Entre estos hechos mencionó el descarrilamiento de trenes en Briansk y Kursk, con saldo de siete muertos y más de 100 heridos, así como un ataque con drones contra el puente de Crimea.
“El régimen de Kiev, en esencia, ha degenerado en una organización terrorista”, afirmó Putin durante una reunión con altos funcionarios transmitida en directo por la televisión estatal rusa.
Negociaciones entre naciones
A pesar de estas declaraciones, el Kremlin dejó abierta la posibilidad de negociaciones indirectas. Ushakov aclaró que, aunque Putin no está dispuesto a dialogar directamente con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, esto no excluye otros contactos que puedan facilitar un arreglo.
Putin también criticó los llamados ucranianos a una tregua de 30 o 60 días, los cuales consideró un intento para reagrupar fuerzas y recibir más armamento occidental. “¿Quién conversa con aquel que apuesta por el terror?”, cuestionó.
En medio de las tensiones, el mandatario ruso coincidió con su canciller, Serguéi Lavrov, al señalar que Moscú debe usar todos los medios disponibles (incluidas eventuales negociaciones) para alcanzar los objetivos establecidos al iniciar su operación militar en Ucrania en febrero de 2022.
Las declaraciones se producen tras una operación militar ucraniana denominada “Telaraña”, que incluyó ataques simultáneos con drones lanzados desde camiones contra cinco aeródromos rusos, lo que se interpretó como una expansión del conflicto hacia regiones más distantes del frente.
