RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.– Los congresistas dominicanos han presentado una contrapropuesta a la reforma constitucional impulsada por el presidente Luis Abinader, desafiando abiertamente su plan de reducir en 53 el número de diputados en la Cámara Baja.
En lugar de esta reducción drástica, los legisladores sugieren eliminar únicamente 15 curules, una cifra significativamente inferior a la propuesta presidencial, que busca reducir la Cámara a 137 diputados.
Esta resistencia proviene principalmente del bloque oficialista del Partido Revolucionario Moderno (PRM), donde el 98% de los legisladores se opone a la drástica disminución sugerida por Abinader.
Los diputados del PRM argumentan que la actual composición de 190 miembros es una «conquista» constitucional, establecida con base en la representación poblacional y que no debe modificarse sin una evaluación exhaustiva. Entre los legisladores que buscan ajustar la propuesta están Ramón Bueno, Soraya Suárez, Ignacio Aracena, Jacobo Ramos, y Kimberly Taveras, entre otros.
Como mencionó el diputado Ramón Bueno, durante las reuniones internas se ha evidenciado que el 98% de los legisladores del PRM no están de acuerdo con la reducción de 53 congresistas, como propone el proyecto de reforma presentado por el Poder Ejecutivo al Senado.
El diputado Bueno indicó que entre las opciones que se están considerando están: reducir sólo 15 diputados, eliminar 10 curules, o mantener inalterada la cantidad de legisladores. Ninguna de estas propuestas se asemeja a la sugerencia inicial de Abinader.
«Vamos a ver cómo llegamos a un acuerdo, pero lo importante es que la reforma no se aprobará tal como se envió al Senado», expresó Bueno, anticipando que Abinader aceptará los acuerdos alcanzados por el Congreso.
El legislador Carlos Sánchez, representante del Distrito Nacional por el PRM, señaló que los 190 diputados están establecidos en la Constitución y que esta cifra no es arbitraria, sino que responde a un cálculo basado en la población de cada demarcación. De igual manera, el diputado Jacobo Ramos sugirió que la cantidad de legisladores debería permanecer congelada, argumentando que reducir la representación en el Congreso disminuiría el poder de decisión del pueblo, afectando negativamente la participación y la democracia.