RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- República Dominicana ha alcanzado el séptimo lugar entre los países más ricos de América Latina y el Caribe, con un Producto Interno Bruto (PIB) per cápita medido a la Paridad del Poder Adquisitivo (PPA) que asciende a 27,120 dólares. Esta cifra la posiciona por encima de naciones con economías más grandes y consolidadas, como Argentina (26,390 dólares), México (25,963 dólares), Brasil (20,809 dólares), Colombia (19,770 dólares), Perú (16,631 dólares) y Paraguay (16,291 dólares), de acuerdo con el ranking publicado por la revista Global Finance.
Este crecimiento económico le ha permitido superar economías tradicionalmente más fuertes y consolidó su lugar en la región como una de las naciones con mayor estabilidad y desarrollo. Los países que se ubican por encima de República Dominicana son Panamá, que encabeza la lista con un PIB per cápita PPA de 44,797 dólares; seguido por Puerto Rico (43,219 dólares), Trinidad y Tobago (32,685 dólares), Chile (31,005 dólares), Uruguay (30,170 dólares) y Costa Rica (28,558 dólares).
En el contexto mundial, el ranking es liderado por Luxemburgo con un impresionante PIB per cápita PPA de 143,743 dólares. En el lado opuesto del espectro regional, Haití, que comparte la isla de La Española con República Dominicana, ocupa la última posición en América Latina y el Caribe, con un PIB per cápita PPA de 3,108 dólares, situándose en el puesto 170 a nivel global.
El crecimiento sostenido de República Dominicana y su capacidad para mejorar el bienestar de su población se han basado en una combinación de políticas fiscales sólidas, estabilidad de su moneda y un entorno de inversión favorable. Estos factores han permitido que el país no solo mantenga su competitividad en la región, sino que también mejore su calidad de vida, lo que se refleja en el incremento de su PIB per cápita, PPPA.
Este índice, medido por la Paridad del Poder Adquisitivo, tiene especial relevancia al comparar la riqueza entre países. A diferencia del PIB nominal, el PPA permite un análisis más preciso de la riqueza real de un país, ya que elimina las distorsiones causadas por las variaciones del tipo de cambio. Así, los ciudadanos dominicanos, al utilizar su moneda local para la mayoría de sus transacciones, ven reflejada una mayor estabilidad económica en su día a día, aun cuando los precios de los bienes importados puedan estar dolarizados.
Impacto social y económico
Este avance en la medición de la riqueza refleja los esfuerzos de República Dominicana por mejorar las condiciones de vida de su población. Además, es un indicador de la capacidad del país para atraer inversión extranjera, mejorar la calidad de sus servicios y promover políticas que fortalezcan la economía interna.
Con este resultado, República Dominicana sigue consolidando su posición como un referente de crecimiento en la región, demostrando que su economía puede competir a nivel internacional y continuar cerrando la brecha con las economías más desarrolladas de América Latina y el Caribe.
