RDÉ DIGITAL, WASHINGTON.-El Senado de Estados Unidos protagoniza desde este martes una histórica sesión de votaciones continuas conocida como vote‑a‑rama, sobre el ambicioso proyecto fiscal y presupuestario impulsado por el presidente Donald Trump. Ya se han cumplido más de 45 votaciones consecutivas, superando el récord anterior de 44 registrado en marzo de 2008.
El marco legislativo, denominado One Big Beautiful Bill Act, contempla recortes fiscales masivos que prolongarían las rebajas de 2017, elevarían el techo de deuda en US\$ 5 billones, aumentarían el gasto en defensa y políticas migratorias, y recortarían inversiones en programas sociales como Medicaid y SNAP. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), el déficit aumentaría en US\$ 3.3 billones en la próxima década un incremento de casi US\$ 1 billón respecto a la versión aprobada en la Cámara Baja.
División republicana y enmiendas clave
La mayoría republicana (53–47) solo puede permitirse hasta tres votos perdidos entre sus filas. El vicepresidente JD Vance y el líder de la mayoría John Thune colaboran para garantizar el mínimo de apoyo. Sin embargo, ya emergen fracturas:
El ala conservadora critica los recortes profundos y el impacto en el déficit, senadores moderados están preocupados por las consecuencias en Medicaid y SNAP, y han rechazado medidas como la limitación de regulación estatal sobre IA.
En la sesión nocturna, se votaron múltiples enmiendas, incluyendo una para eliminar restricciones estatales sobre la inteligencia artificial. El paquete se dirige ahora de regreso a la Cámara de Representantes para incorporar las enmiendas del Senado, mientras el plazo autoimpuesto por Trump para la firma el 4 de julio, Día de la Independencia se acerca rápidamente.
El Senado batió un récord histórico de 45 votos consecutivos en la maratónica sesión del vote‑a‑rama, debatiendo un paquete fiscal y de gasto valuado en US\$ 3.3 billones, que extiende recortes y recorta programas sociales. Las divisiones internas entre republicanos y el limitado margen de victoria solo tres votos de diferencia hacen de esta una batalla clave en plena temporada de presupuestos ajustados.
