RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- Las recientes afirmaciones del ministro de Defensa de Haití, Jean-Michel Moïse, durante su intervención ante la Organización de Estados Americanos (OEA), han sido interpretadas por diversos medios dominicanos como un ataque directo contra la República Dominicana, al señalarla como vía de entrada para el contrabando de armas que alimenta la crisis de seguridad haitiana.
Durante su alocución, Moïse denunció la situación crítica que enfrenta su país, atribuyendo gran parte de la violencia al accionar de bandas criminales “fuertemente armadas, organizadas y financiadas”, y apuntó a la “frontera porosa con República Dominicana” como uno de los principales puntos de entrada ilegal de armas.
Frontera dominico-haitiana bajo escrutinio
“La corrupción y el contrabando facilitan la entrada ilegal de armas y municiones que están matando a nuestro pueblo”, expresó el ministro haitiano, agregando que la debilidad en el control fronterizo contribuye a alimentar la violencia en Haití. También responsabilizó a redes transnacionales del tráfico de drogas, en particular aludiendo a Colombia como fuente principal de la cocaína que transita por su país.
Estas declaraciones han provocado malestar en sectores dominicanos, que consideran que Moïse utilizó la tribuna internacional para deslindar responsabilidades internas y presentar a República Dominicana como parte del problema sin reconocer los esfuerzos bilaterales de control fronterizo.
RD rechaza señalamientos y aboga por cooperación regional.
Fuentes diplomáticas dominicanas han manifestado su sorpresa ante los señalamientos, recordando que el país ha mantenido una postura de colaboración activa con organismos internacionales para enfrentar el tráfico ilícito, y ha implementado medidas de vigilancia y control en la zona limítrofe.
Aunque no se ha emitido una respuesta oficial del Gobierno dominicano al discurso, se espera que la Cancillería fije posición en las próximas horas. Analistas locales advierten que atribuir la raíz de la violencia haitiana a factores externos invisibiliza la crisis institucional interna que atraviesa el país vecino.
Llamado internacional y advertencia sobre seguridad regional
Moïse finalizó su intervención solicitando el respaldo urgente de la comunidad internacional: “La soberanía nacional de Haití no podrá restaurarse sin un esfuerzo colectivo”, dijo, advirtiendo que la inestabilidad haitiana representa una amenaza para toda la región.
El llamado incluyó peticiones de apoyo logístico, equipos de vigilancia marítima y cooperación para controlar fronteras, con énfasis en la que comparten con República Dominicana. Mientras tanto, en Santo Domingo, el discurso ha encendido alertas políticas y diplomáticas.
El episodio reaviva el delicado equilibrio entre ambos países caribeños, marcados por una frontera común, pero también por profundas diferencias estructurales y tensiones históricas.