RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.-El presidente Luis Abinader expresó su preocupación por la creciente pérdida de confianza en la democracia en América Latina y la tendencia de algunos presidentes de la región a perpetuarse en el poder. Durante su intervención en la vigésima séptima Conferencia Anual del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), en Washington, Abinader citó el caso de Nicolás Maduro, reelecto en Venezuela en elecciones controversiales el 28 de julio, como un ejemplo de estos problemas.
El mandatario se basó en datos de la encuesta Latinobarómetro, que revela la inquietud de los latinoamericanos por el personalismo, la corrupción y la reelección indefinida, fenómenos que han afectado la estabilidad democrática. “El caso más reciente es el de Venezuela, con concentración del poder y persecución de la oposición”, subrayó Abinader.
El presidente hizo hincapié en la amenaza que representa la reelección indefinida para la democracia, señalando que la reforma constitucional propuesta en la República Dominicana busca prevenir tales intentos. “Esta reforma es una acción preventiva frente a cualquier intento de perpetuarse en el poder”, afirmó.
En su discurso, Abinader también abordó la crisis en Haití, instando a la comunidad internacional a no olvidar el tema y colaborar en la solución. “Esto es crucial para la seguridad en el Caribe. Continuaremos trabajando con la comunidad internacional para evitar que Haití caiga en el olvido”, concluyó.
Sobre la economía dominicana, el presidente destacó el dinamismo económico del país, que ha mostrado un crecimiento robusto y sostenible. En 2023, el PIB per cápita alcanzó los 11,200 dólares, situando a la República Dominicana como la séptima economía en América Latina y el Caribe. Entre 2021 y 2023, el PIB creció a un promedio anual del 6.5%, y se proyecta un crecimiento de 5.4% para 2024, superior al promedio regional del 1.9%.
“Nuestro crecimiento económico ha sido excepcional gracias a políticas prudentes, seguridad jurídica para la inversión privada y un entorno político estable”, concluyó Abinader.