RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO. – Tras dos décadas de debates en el Congreso Nacional, el proyecto de ley del nuevo Código Penal ha retomado relevancia en el contexto político actual. Iniciado en agosto de 2020 con renovadas expectativas de aprobación, el proyecto sufrió un revés debido al desacuerdo sobre las tres causales, lo que llevó a su archivo por temor a repercusiones electorales de cara a los comicios de 2024.
Según declaraciones de Alexis Jiménez, presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados en noviembre de 2023, “es muy difícil que algún diputado la someta en plena campaña política”. Sin embargo, con la garantía de extender la legislatura hasta 2028, el debate ha resurgido tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, con la posibilidad de ser aprobado antes del 26 de julio, fecha límite de la legislación actual.
El nuevo Código Penal, que consta de 421 artículos, incluye 77 nuevos tipos penales y endurece las condenas para crímenes como el sicariato y el feminicidio, aumentando las penas acumuladas hasta 60 años y fijando en 40 años la prisión para estos delitos. Además, contempla sanciones más severas para los reincidentes y para casos de corrupción y tráfico de influencias, marcando así el fin de una legislación vigente desde el 20 de agosto de 1844.
A pesar de un consenso generalizado del 99 % en los puntos del proyecto, el punto de discordia sobre las tres causales ha polarizado la discusión y ha impedido hasta ahora su aprobación definitiva. En recientes sesiones, legisladores como Rogelio Genao del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) e Yván Lorenzo del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) han reavivado el debate, destacando la importancia de avanzar con la aprobación.
En la Cámara Baja, el diputado Ramón Bueno del PRM reconoció la responsabilidad de su partido, que posee la mayoría congresual, para llevar adelante la aprobación del proyecto. Mientras tanto, Sócrates Pérez del PLD acusó al PRM de desentenderse del tema a pesar de su mayoría.
Con estos elementos sobre la mesa, legisladores como Dionis Sánchez de la Fuerza del Pueblo (FP) proponen separar el debate sobre las tres causales para asegurar la aprobación del resto del Código Penal antes del cierre de la legislatura.
El futuro del nuevo Código Penal dominicano parece ahora estar en manos del consenso político necesario para superar las diferencias y llevar adelante esta histórica actualización legislativa.