RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.– Cada 21 de diciembre se celebra el Día Mundial del Baloncesto, una fecha para rendir homenaje a un deporte que ha cautivado a millones de personas alrededor del mundo por su dinamismo, estrategia y el talento de sus jugadores. Esta conmemoración destaca, además, el impacto del baloncesto en la promoción de la actividad física y el trabajo en equipo.
El origen de esta fecha remonta a 1891, cuando se jugó el primer partido de baloncesto en Springfield, Massachusetts, Estados Unidos. En sus primeras versiones, el deporte utilizaba un balón de fútbol y dos cestas de melocotones como canastas. El objetivo de su creación fue ofrecer una alternativa menos violenta que otros deportes, permitiendo su práctica en interiores durante los fríos inviernos.
La creación del baloncesto
James Naismith, profesor canadiense de educación física, fue el inventor del baloncesto. Mientras se desempeñaba como instructor en el YMCA International Training School de Springfield, ideó un juego que combinara habilidad, estrategia y trabajo en equipo, apto para practicarse en espacios cerrados. El baloncesto fue concebido como una forma de mantener activos a los estudiantes durante la temporada invernal.
Crecimiento global y profesionalización
Con el paso del tiempo, el baloncesto ha crecido exponencialmente en popularidad, dando lugar a la creación de diversas organizaciones que han promovido su práctica a nivel profesional. La Federación Internacional de Baloncesto (FIBA), fundada en 1932, ha sido clave en la organización de torneos internacionales, como el Campeonato Mundial y los Juegos Olímpicos, consolidándose como el principal ente rector del baloncesto mundial.
Por su parte, la NBA (National Basketball Association) se ha establecido como la liga de baloncesto más reconocida a nivel global, atrayendo a jugadores de todo el mundo y ofreciendo una plataforma única para el talento internacional. La NBA ha logrado cautivar a millones de fanáticos con sus espectaculares partidos, mostrando a estrellas legendarias y contribuyendo al crecimiento del baloncesto en todos los rincones del planeta.
El Día Mundial del Baloncesto no solo es una celebración del deporte, sino también un recordatorio de su capacidad para unir a personas de diferentes culturas y orígenes, fomentando valores como el trabajo en equipo, la disciplina y la perseverancia.