RDÉ DIGITAL, ESTADOS UNIDOS. – LeBron James decidió no ejercer la opción contractual que le permitiría continuar con los Lakers la próxima temporada por 51,4 millones de dólares.
Esta decisión, anunciada por su agente Rich Paul, busca abrir espacio salarial para que los Lakers puedan reforzar su plantilla con otra estrella que complemente las ambiciones del equipo por competir por el título.
El alero tenía sobre la mesa un contrato por tres años y 162 millones de dólares, pero renuncia a él con la intención de liberar 12,9 millones que podrían destinarse a fichajes de alto perfil.
Sin embargo, Paul ha aclarado que, si los Lakers no logran adquirir una figura significativa en el mercado, LeBron buscará un nuevo acuerdo que maximice su salario.
Entre los posibles fichajes que podrían fortalecer a los Lakers se encuentra Klay Thompson, cuya salida de los Warriors parece cada vez más plausible tras una era exitosa en Golden State, donde ganó cuatro campeonatos.
Otros nombres en la lista de posibles incorporaciones para los Lakers incluyen a James Harden y Jonas Valanciunas, entre otros.
Además del enfoque competitivo, la decisión de LeBron también tiene un aspecto sentimental, ya que su hijo Bronny James fue seleccionado por los Lakers en la posición 55 del draft. Esto podría permitir que LeBron cumpla su sueño de jugar al menos una temporada junto a su hijo, marcando un hito histórico en la NBA.
