Este fin de semana, padres y familiares se reunieron para dar el último adiós a Nicholas Feliz Dominici, el pequeño de dos años cuya vida fue truncada de manera trágica en una guardería de El Bronx debido a la exposición al fentanilo.
La comunidad se reunió para honrar la memoria de Nicholas, un niño de ascendencia dominicana, cuyo destino conmovió a todos. El niño fue sepultado en el Oakland Cemetery, ubicado en el área de El Bronx, una semana después de que él y otros tres bebés resultaran intoxicados por la droga en la guardería Divino Niño.
Un día antes, el niño fue despedido en un emotivo funeral en la The Riverdale Funeral Home, en el área de Inwood, Manhattan.
En una emotiva carta compartida en una plataforma de recaudación de fondos para su funeral, sus padres, Otoniel y Zoila, recordaron a Nicholas como un niño amable, curioso y lleno de alegría.
“Nuestro hijo era un niño feliz, alegre, inteligente, amable, curioso, cariñoso; todas las palabras para describir lo más hermoso y tierno no serían suficientes para describir a nuestro hijo”, compartieron sus padres en la carta.
Los padres también expresaron su incredulidad ante la tragedia, ya que confiaban en que la guardería sería un lugar seguro mientras ellos trabajaban para brindar un futuro mejor a Nicholas y sus hermanos.
Hasta ahora, se han recaudado 35,000 dólares en apoyo a la familia.
El 21 de septiembre, la policía descubrió un “escondite secreto” en la guardería Divino Niño que contenía fentanilo, otras sustancias ilegales y herramientas para su procesamiento. Grei Méndez y Carlisto Acevedo Brito enfrentan cargos federales relacionados con el trágico incidente, incluyendo asesinato y posesión ilegal de drogas con la intención de distribuirlas. El esposo de Méndez sigue prófugo y la guardería ha sido clausurada.
