Cada vez estamos más conscientes de la importancia de hacer ejercicio de forma regular. No solo nos ayuda a mantenernos en forma y a cuidar nuestra salud física, sino que también se convierte en una vía para liberar el estrés. Muchos de nosotros seguimos rutinariamente nuestras sesiones en el gimnasio, ya sea en la cinta de correr, realizando abdominales, flexiones, estiramientos o en la elíptica. Sin embargo, lo que quizás no sabías mientras te sumerges en tu mundo de música con auriculares es que hacer deporte en grupo puede ser aún más beneficioso.
Según la reconocida psicóloga deportiva, Jane Smith, afirma:
“El deporte en grupo no solo es una forma efectiva de mantenerse activo, sino que también aporta una dimensión social que puede tener un impacto positivo en la salud mental y emocional. La interacción con otros, el apoyo mutuo y la diversión compartida hacen que las personas sean más propensas a mantenerse comprometidas con su rutina de ejercicios”.
En lo que respecta a los beneficios individuales, a continuación, profundizaremos en algunos de los más relevantes:
“Hacer ejercicio en grupo es una oportunidad para fortalecer la interacción social y establecer nuevas amistades, lo que va más allá de la actividad en sí”.
Al practicar deporte en grupo, la interacción social es inevitable. Incluso si las actividades se realizan de forma individual, la dinámica de entrenar con otros se asemeja a las interacciones que se dan en clases de inglés, en el trabajo o en un club de lectura. Los lazos que se crean en torno a la actividad física se traducen en una afinidad que conduce a la realización de actividades adicionales fuera del horario de ejercicio. Incluso, si asistes a la clase con amigos ya conocidos, el deporte fortalecerá esos lazos.
“La motivación y la constancia se ven reforzadas al formar relaciones interpersonales en el grupo de deporte, lo que hace que la pereza sea menos poderosa al momento de ejercitarse”.
Establecer relaciones con otros miembros del grupo y formar amistades aumenta la motivación para hacer deporte y disminuye la pereza que a menudo nos asalta al pensar en ir al gimnasio. Además, el entrenamiento en grupo es más dinámico y entretenido, ya que permite variar los ejercicios al trabajar en parejas o subgrupos.
“Realizar deporte en grupo no solo libera el estrés, sino que también mejora la forma en que enfrentamos la vida cotidiana y refuerza la confianza en uno mismo”.
La reducción del estrés cambia la perspectiva de la vida diaria, y sentirse aceptado y valorado por otros también mejora la autoestima. Descubrir que somos capaces de realizar el ejercicio de manera efectiva se refleja en otras áreas de la vida, lo que fortalece nuestra confianza. Un estudio de la Universidad de Nueva Inglaterra encontró que la calidad de vida emocional mejora en un 26% cuando se hace deporte en grupo.
“El deporte en grupo fomenta la competitividad de manera positiva, alentando a superarnos a nosotros mismos y estableciendo límites más altos”.
El deporte en grupo permite establecer desafíos entre compañeros, llevándonos más allá de nuestras propias limitaciones. Un estudio en Inglaterra reveló que el 64% de las mujeres que hacían deporte con amigas podían alcanzar límites mucho más altos en comparación con las que entrenaban solas.
“El ejercicio en grupo no solo beneficia la salud física, sino que también mejora la concentración y las capacidades cognitivas”.
Investigaciones realizadas en la Universidad de Vrije en Holanda y en la Universidad de Princeton en los Estados Unidos demuestran que el ejercicio en grupo estimula la regeneración neuronal y mejora la conexión entre las neuronas.
En resumen, hacer deporte es beneficioso, pero hacerlo en grupo puede proporcionar aún más ventajas para tu salud y bienestar.