RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- Ezequiel Frías, un destacado flautista y saxofonista dominicano, ha emergido como una figura prominente en el mundo de la música, desafiando estereotipos y superando obstáculos significativos en su camino hacia el éxito profesional.
Desde temprana edad, Frías mostró un talento excepcional tanto en las artes como en las matemáticas. A pesar de su pasión por la música, inicialmente optó por una carrera en redes de la información en el Instituto Tecnológico de las Américas (ITLA), siguiendo las expectativas familiares y sociales.
Sin embargo, una conversación reveladora con su primo lo llevó a reevaluar su vocación y decidirse por la música, abandonando su beca y carrera en ITLA para dedicarse plenamente a sus estudios musicales.
El cambio de rumbo no fue fácil. Frías enfrentó un período de incertidumbre y desilusión mientras intentaba estudiar música en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde encontró deficiencias en la oferta académica.
Su determinación lo llevó a la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU), donde, a pesar de limitaciones económicas y la presión familiar, logró obtener una media beca. El apoyo de una profesora y el Ministerio de la Juventud le permitieron continuar sus estudios y graduarse en Música Contemporánea.
Frías ha tenido una destacada carrera, tocando con artistas de renombre como Il Volo, Maridalia Hernández, Danny Rivera, y Raphael. Su pasión por la música lo llevó a Europa en 2019, con la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil RD, y a participar en congresos y talleres en Colombia y Brasil.
En redes sociales, bajo el nombre de «Ezetumbao», ha ganado popularidad por sus interpretaciones musicales innovadoras y sus comentarios sobre la música dominicana.
Hoy, Ezequiel Frías se erige como un ejemplo de perseverancia y dedicación. Su mensaje para los jóvenes músicos dominicanos es claro: «No paren de trabajar, que nadie les diga que no se puede. La juventud dominicana sí puede, sí hay talento, y hay jóvenes que quieren dejar un legado.»
La historia de Frías subraya que, con determinación y pasión, es posible superar las barreras y alcanzar el éxito en el mundo de la música.