RDÉ DIGITAL, SANTO DOMINGO.- Según la Organización Mundial de la Salud, la salud mental es un componente vital del bienestar humano, pero en la República Dominicana, al igual que en muchos lugares del mundo, enfrentamos desafíos significativos en este frente. Los trastornos mentales, que abarcan una amplia gama de condiciones, desde la ansiedad y la depresión hasta la esquizofrenia y los trastornos de la alimentación, afectan a una proporción considerable de nuestra población.
Según la Undécima revisión de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11), un trastorno mental se caracteriza por una alteración clínicamente significativa en la cognición, la regulación emocional o el comportamiento de un individuo. Esta alteración, que puede manifestarse de diversas maneras, a menudo conlleva angustia o discapacidad funcional en áreas importantes de la vida de una persona.
En 2019, aproximadamente una de cada ocho personas en el mundo, lo que equivale a 970 millones de personas, vivía con un trastorno mental. En República Dominicana, los datos son igualmente preocupantes: un 20% de los dominicanos enfrenta enfermedades de salud mental, una cifra que merece una atención urgente y sostenida.
La pandemia de COVID-19 ha exacerbado aún más esta crisis. En 2020, vimos un aumento significativo en los casos de ansiedad y depresión como resultado del estrés y la incertidumbre asociados con la pandemia. La salud mental de nuestra población ha sido sometida a una presión sin precedentes, y es vital que respondamos con compasión y acción.
Uno de los mayores obstáculos que enfrentamos en la atención de la salud mental es el estigma y la discriminación. Demasiadas personas que padecen trastornos mentales son marginadas y excluidas, lo que dificulta que busquen el apoyo y tratamiento que necesitan. Es fundamental que desafiemos estas percepciones erróneas y trabajemos juntos para crear una cultura de aceptación y comprensión.
El Ministerio de Salud Pública ha tomado medidas importantes para abordar esta crisis, incluido el establecimiento del centro de contacto «Cuida tu salud mental». Este recurso vital ofrece asistencia psicológica a través de un número gratuito y ha sido un salvavidas para miles de dominicanos que buscan ayuda.
Sin embargo, queda mucho por hacer. La atención de la salud mental debe integrarse de manera más completa en nuestros sistemas de salud, tanto en el ámbito público como en el privado. Esto significa aumentar el acceso a servicios de calidad y garantizar que sean asequibles para todos los dominicanos.
Además, es fundamental que invirtamos en la educación pública sobre la salud mental y promovamos la conciencia y comprensión de estos problemas en toda la sociedad. Necesitamos trabajar juntos para eliminar el estigma y crear un entorno en el que todas las personas se sientan seguras y apoyadas para buscar ayuda cuando la necesiten.
La salud mental no es un lujo; es un derecho humano fundamental. Todos tenemos un papel que desempeñar en la creación de una sociedad más compasiva, inclusiva y solidaria. Es hora de que nos unamos en este esfuerzo y hagamos de la salud mental una prioridad para todos los dominicanos.
