El tema de la inteligencia artificial (IA) también ha cobrado fuerza en el mercado financiero, con debates sobre hasta qué punto esta herramienta puede ayudar e incluso reemplazar ciertas actividades que actualmente llevan a cabo profesionales que van desde analistas hasta gestores.
Según la experta británica en inteligencia artificial, Clara Durodié, autora del exitoso libro «Descifrando la IA en los servicios financieros: implicaciones empresariales para consejos de administración y profesionales», publicado en 2019, la tecnología debe adaptarse a cada tipo de servicio financiero y no todas las estrategias de inversión pueden ajustarse para aprovechar la IA.
«Si eliminas el factor humano de la toma de decisiones de inversión, tendrás muchos problemas», dijo Durodié en una entrevista con Bloomberg Línea. La experta visitó Brasil en agosto para participar en un panel sobre el impacto de la IA en las inversiones en el Anbima Summit, evento organizado por la asociación que agrupa a las entidades del mercado de capitales del país, en São Paulo.
Mientras que en los fondos cuantitativos, por ejemplo, la herramienta puede ser adecuada para el perfil del producto y de los inversores, ya que utilizan modelos estadísticos para encontrar asimetrías y oportunidades de ganancias en el mercado, en otros casos podría no ser la mejor opción.
Este es el caso, por ejemplo, de los gestores de activos o los family offices, que cuidan del patrimonio de familias adineradas, según la experta.
«Si no se invierte bajo demanda, teniendo en cuenta la filosofía de vida y las necesidades específicas de cada familia, por ejemplo, perderán negocios», aseguró.
Esto se debe a que el riesgo de perder mucho dinero o de utilizar soluciones no adecuadas para estas familias es grande, añadió.
Según ella, es posible tener mucho éxito en las inversiones cuando se utiliza la inteligencia artificial, siempre y cuando sea un «ejercicio intelectual». «Hay pruebas de que la IA por sí sola no genera rendimientos significativamente mayores que las decisiones humanas. Y lo digo como ex front office», comentó haciendo referencia a su experiencia previa en puestos de liderazgo en gestión de activos y patrimonios en el Reino Unido y Europa.
También añadió: «No estoy en el grupo de personas que creen que la IA va a quitar el trabajo a los banqueros y asesores de inversión. Los bancos y las corredoras pueden optar por sustituirlos, pero pronto se darán cuenta de que fue una decisión equivocada».
Durodié mencionó que dejó su trabajo en el mercado financiero de Londres para investigar y estudiar inteligencia artificial y ciencia de datos. Cuenta con más de 25 años de experiencia en tecnología financiera y finanzas.
También señaló su especial preocupación por el tema de la seguridad de los datos en los servicios financieros, desde la regulación por parte de los bancos centrales hasta la ciberseguridad.
